SANTEE, California.- Las autoridades investigan este martes las informaciones de que el adolescente Charles Andrew Williams -quien será juzgado como un adulto- había indicado a otras personas sus intenciones de disparar contra los estudiantes, información que, al parecer, fue ampliamente ignorada.
Williams disparó ayer contra los ocupantes de la escuela de enseñanza secundaria Santana y mató a dos adolescentes, además de herir a otras 13 personas en este suburbio situado a unos 16 kilómetros al noreste de San Diego.
Una persona murió en el lugar del tiroteo y otras 13 resultaron heridas, dijo el vocero del Departamento de Bomberos de Santee, Jeff Fehlberg. Poco después, una segunda víctima murió en el hospital.
Los dos muertos eran adolescentes, y por lo menos dos de los heridos eran regentes de disciplina en el centro educativo, dijo el jefe de alguaciles William Kolender. Algunos estudiantes dijeron que el joven de 15 años fue objeto constante de bromas y críticas por parte de sus compañeros y varios indicaron que Williams les dijo que traería un arma a la escuela y que dispararía indiscriminadamente, pero no le creyeron.
"Creímos que bromeaba", afirmó Neil O'Grady, un alumno de 15 años. Otro estudiante dijo que Williams sonreía cuando comenzó a disparar con una pistola del calibre 22.
Al parecer, Williams ocultó el arma en una mochila.
El estudiante John Schardt, de 17 años, dijo a la televisora KGTV que estuvo en un salón cercano cuando comenzaron los disparos en un baño. "Era un caos total. Todo el mundo intentaba cubrirse", dijo Schardt.
Este dijo que tomó fotos y que otro estudiante filmó el incidente, pero las autoridades les confiscaron las películas. En Washington, el Presidente George W. Bush calificó el tiroteo como "un desdichado acto de cobardía" y dijo que la mejor prevención es enseñar a los niños a diferenciar entre el bien y el mal.