SAN SALVADOR.- La Procuraduría General de la República interpuso una tercera solicitud de indulto para dos de los cinco ex guardias salvadoreños condenados a prisión por el asesinato de cuatro monjas estadounidenses en 1980.
El Procurador general Miguel Cardoza presentó la petición la semana anterior a la Corte Suprema de Justicia, informa hoy la prensa local.
Cardoza solicitó el indulto para Francisco Orlando Contreras y Carlos Joaquín Contreras, que no fueron beneficiados con la libertad condicional que favoreció en 1998 a otros tres de sus compañeros.
La Corte Suprema de Justicia aduce que los detenidos no cumplen con los requisitos de ley. Un juez decidió además que los ex guardias debían continuar en prisión por tener antecedentes de amotinamiento y por posesión de armas de guerra.
El sargento Luis Colindres, que comandaba el grupo; José Moreno y Daniel Canales, fueron beneficiados con la libertad condicional por cumplir los requisitos de buena conducta y haber cumplido las dos terceras partes de la condena.
Los cinco ex guardias fueron condenados en 1984 a 30 años de cárcel por haber violado y asesinado a las monjas estadounidenses Ita Ford, Maura Clarke, Dorothy Kazel y la seglar Jean Donovan. El crimen ocurrió la noche del 2 de diciembre de 1980, cuando comenzaba la guerra civil de este país.
Los condenados, obviando el sargento, aseguran que el crimen fue cometido "por órdenes superiores".
Un jurado federal decidió el pasado 3 de noviembre que el ex ministro de Defensa salvadoreño José Guillermo García y el ex director de la Guardia Nacional Carlos Eugenio Vides Casanova no fueron responsables de los asesinatos.
García y Vides Casanova, que viven en los Estados Unidos, estaban acusados por familiares de las víctimas de ser los autores intelectuales del crimen.