SHIJIAZHUANG.- Una serie de explosiones en edificios residenciales del norte de China causaron el viernes por lo menos 108 muertos, y la policía cree que fue un ataque intencional, informó la televisión oficial.
Las autoridades buscan a un residente de uno de los edificios. La policía se abstuvo de informar si el individuo era un sospechoso en las explosiones que arrasaron las viviendas de cuatro compañías de esta ciudad del norte de China.
Pero el noticiero nocturno de la televisión nacional dijo que el hecho era catalogado como caso criminal.
"Las comprobaciones preliminares de las investigaciones policiales determinan que la explosión fue causada por un criminal", dijo la televisora sin dar detalles. Añadió que hubo 38 heridos.
Un anuncio de búsqueda es publicado hoy en primera plana de los diarios locales, debajo de una información de que los dirigentes chinos enviaron un delegado al sitio de las explosiones.
Jin Ruchao, de 40 años, es buscado por un asesinato el 9 de marzo en el sudoeste de China y por "crímenes actuales extremadamente graves", dice el anuncio.
Poniendo de relieve la urgencia del caso ofrece una recompensa de 50.000 yuan (6.000 dólares), equivalente a 10 veces el salario urbano promedio.
Jin residía en las viviendas de los obreros de la Algodonera Número 3, dice el anuncio. Ese edificio de cinco pisos, que un oficial de bomberos dijo que alojaba 48 familias, fue reducido a escombros por una explosión el viernes a la madrugada.
Fue seguida por otras a intervalos de una hora y a varios kilómetros de distancia una de otra. Arruinaron las viviendas de dos algodoneras, una oficina ferroviaria y una firma de construcción.
Las explosiones son comunes en China, ya sea accidentales o intencionales. Los ataques son perpetrados con explosivos industriales, que se obtienen fácilmente, y son atribuidos a la delincuencia organizada, amantes despechados y otros individuos.
Shijiazhuang, capital de la provincia de Hebei, es un importante centro industrial situado a unos 280 kilómetros al sudoeste de Pekín. Tiene una población de unos 7 millones de habitantes.
Funcionarios de la ciudad y de la provincia de Hebei acudieron al sitio de las explosiones a fin de supervisar las tareas de rescate e investigar las causas, dijo la agencia oficial Sinjuá.
Hace 10 días, 42 personas, en su mayoría niños, murieron en una explosión en una escuela de la sureña provincia de Jiangji.