LONDRES.- Nuevos disturbios racistas se desataron hoy en la ciudad inglesa de Oldham, cerca de Manchester, donde por la tarde jóvenes asiáticos atacaron un pub a pedradas, al tiempo que se reportaron "peleas esporádicas" en varios suburbios.
Graves desórdenes se habían sucedido ya en la madrugada de hoy, cuando unos 500 jóvenes asiáticos se enfrentaron con la policía durante siete horas en peleas callejeras, con un saldo de 25 heridos.
Los medios de comunicación británicos describieron los disturbios como los más serios desde las peleas en varias áreas pobladas por negros a principios de los 80.
Según informó la policía, la violencia se desató luego de que una pandilla de jóvenes blancos atacara, alrededor de las 20:30 (local) de ayer, algunas casas de ciudadanos asiáticos. Cuatro personas fueron arrestadas por ese ataque.
Poco después, unos 100 jóvenes asiáticos lanzaron cócteles molotov y piedras contra el pub Live and Let Live (Vive y deja vivir), del barrio Goldwick, mayormente poblado por asiáticos, incendiaron un auto y dañaron otros.
Los oficiales pertrechados enfrentaron a la multitud y sacaron a algunos individuos de la muchedumbre. Varias patrullas policiales fueron tan seriamente dañadas por las bombas molotov y las piedras que no podrán ser reparadas.
El jefe policial Eric Hewitt sostuvo que la situación es "muy seria" y consideró los hechos como de una "brutalidad sin precedentes", que afectó profundamente a todos los habitantes de la ciudad. "Nunca había visto escenas como éstas".
A pesar de que las tensiones entre los diferentes grupos de la población fueron en aumento en los últimos meses, nadie contaba con una escalada de violencia como la que se dio, añadió.
Desde el año pasado, Oldham es escenario de incidentes raciales. Según se informó, existen bandas asiáticas que no permiten la entrada de ingleses en determinados barrios de Oldham. El mes pasado, un veterano de guerra de 76 años, que se atrevió a acercarse a uno de estos barrios, fue fuertemente golpeado.
Un joven asiático de quince años está siendo procesado por este hecho, calificado de "ataque de motivación racista". Desde ese incidente, extremistas de derecha británicos intentaron ya varias veces marchar por el barrio.
El 5 de mayo pasado fueron detenidas 16 personas tras enfrentamientos entre bandas inglesas y asiáticas.
