LONDRES.- La batalla de Gran Bretaña contra la fiebre aftosa todavía no se ha ganado y nuevos brotes de la enfermedad y áreas y sitios todavía afectados alejan la esperanza de que la epidemia esté bajo control en el país, dijeron este miércoles representantes del sector agropecuario.
Pasados 100 días de que se detectaran los primeros brotes, puede que haya menguado el apetito ciudadano por las imágenes de restos de animales sepultados masivamente o incinerados en piras funerales, pero los agricultores dicen que su ira será mucho más difícil de soslayar.
"Cien días de vacilaciones del gobierno, dolores de cabeza y equivocaciones. Han contenido la enfermedad, pero no la han doblegado. Seguirá siendo un dolor de cabeza por mucho más tiempo", dijo Richard Haddock, un ganadero del suroeste de Inglaterra.
"La aftosa sigue latente en nuestro hato, pero no vamos a permanecer pasivos por mucho tiempo más", gritó a través de su teléfono celular, mientras viajaba en su automóvil para participar en una manifestación convocada frente a la delegación del Ministerio de Agricultura en su región.
El ministerio, el gobierno y el Primer Ministro Tony Blair han sido criticados ampliamente por los agricultores y los residentes de las zonas rurales desde que la aftosa fue detectada en una granja porcina el 20 de febrero.
En 100 días, la altamente contagiosa enfermedad del ganado se ha propagado rápidamente a lo largo y ancho de Gran Bretaña, llevando a la matanza de más de 3,0 millones de animales, la pérdida de los mercados de exportación para los cárnicos y derivados y la baja en los ingresos por turismo, así como también a la demora en convocar a una elección general.
Algunos funcionarios europeos responsabilizaron a Gran Bretaña de exportar la aftosa apenas años después de haber hecho lo mismo con la llamada enfermedad de las vacas locas, cuando Francia, Holanda e Irlanda confirmaron que habían verificado brotes en sus hatos.
Hace unas semanas, cuando finalmente se convocó a elecciones generales para el 7 de junio en Gran Bretaña, funcionarios dijeron que por fin se había ganado la batalla contra la aftosa. Pero nuevos brotes en el norte de Inglaterra han llevado a muchos expertos a decir que la enfermedad puede sembrar el caos durante muchos meses por venir.
"Todavía no ha terminado. Aunque hay muchas áreas abiertas a la ciudadanía, hay otras que continúan clausuradas porque siguen surgiendo nuevos casos en áreas como Cheshire, Lancashire", dijo una portavoz de la Unión Nacional de Agricultores. "Eso ciertamente prolongará las penurias de aquellos agricultores que apenas acaban de experimentar brotes. Es difícil decir si eso se prolongará a nivel nacional", agregó.