HOUSTON.- Las inundaciones causadas por lluvias torrenciales, remanentes de la tormenta tropical Allison, obligaron el sábado a miles de personas a abandonar sus hogares y dejaron a un gran número de conductores varados durante horas en las autopistas inundadas, con sus vehículos bajo el agua.
El alcalde Lee Brown declaró un estado de emergencia y pidió a las autoridades estatales que ayuden con botes y personal de rescate acuático. varios helicópteros de la Guardia Costera fueron enviados para rescatar a personas que habían tenido que subir a sus azoteas.
"Este incidente es de tal gravedad, de tal magnitud, que la respuesta efectiva va más allá de la capacidad de la ciudad de Houston para recuperarse si carece de ayuda estatal y federal", manifestó.
El gobernador Rick Perry declaró el estado de emergencia en 28 condados del sudeste de Texas, según la vocera Kathy Walt. El funcionario también pidió al gobierno federal que incluya a esos condados en su lista de préstamos de bajo interés para ayuda de desastres, así como subvenciones y otro tipo de asistencia.
Brown dijo que por lo menos 3.000 casas y empresas resultaron dañadas en Houston, y quizás unas 10.000 familias hayan tenido que abandonar sus casas.
Todas las autopistas de la ciudad han estado bloqueadas por el alto nivel del agua, tras la lluvias que se reanudaron el viernes temprano.
Muchos pasaron la noche en terraplenes de autopistas o tiendas abiertas las 24 horas porque sus autos quedaron inundados.