BERLIN.- El Canciller alemán, Gerhard Schroeder, telefoneó al Primer Ministro japonés, Junichiro Koizumi, para pedirle "enérgicamente" que su Gobierno se avenga a ratificar el protocolo de Kioto en la cumbre del clima de Bonn, cuyo comienzo oficial se ha retrasado tres días, al próximo 19 de julio.
Schroeder apeló al Primer Ministro para que no dejara fracasar el protocolo, que prevé la reducción de las emisiones de los gases que provocan el efecto invernadero, según comunicó hoy, viernes, el portavoz del gobierno alemán, Uwe-Karsten Heye.
En la llamada telefónica, el canciller pidió que Japón "coopere constructivamente" para alcanzar un acuerdo y recordó a Koizumi que el hecho de que su Gobierno ratifique el protocolo no cerrará ningún camino de cooperación con EE.UU.
El Primer Ministro nipón apuntó que en Tokio continúan las consultas internas y que su Gobierno todavía no ha decido la postura que tomará en Bonn.
La decisión de Japón será decisiva para que el protocolo de Kioto entre en vigor, algo que sólo es posible si se consigue la ratificación de 55 países que produzcan al menos el 55 por ciento de los gases contaminantes.
EE.UU. y otros países emisores, como Australia, han anunciado ya su negativa a ratificarlo, por lo que para alcanzar el mínimo imprescindible es necesario convencer a los países indecisos.
Japón mantiene una postura ambigua y Kouzumi se mostró el pasado lunes partidario de modificar el protocolo de tal manera que EE.UU. se avenga a ratificarlo, algo que los gobiernos europeos no están dispuestos a consentir.
Los socios comunitarios sí aceptan hacer determinadas concesiones a Japón, que quiere que se contabilicen temporalmente sus bosques como método de absorción de gases, como recordó ayer el ministro alemán de Medio Ambiente, Júrgen Trittin.
Probablemente con el fin de limar asperezas con los países indecisos ha decidido retrasarse en tres días la inauguración oficial la conferencia de Bonn.
El comienzo será, tras el cambio de programa, el jueves 19, día en el que llegarán los ministros de Medioambiente, que participarán en la conferencia hasta el domingo 22.
Desde el 23 hasta el 27 de julio continuarán las negociaciones diplomáticas, según el centro de información de la ONU en Bonn.
En un principio estaba previsto que la inauguración oficial de la cumbre fuera el lunes 16, pero, según la nueva agenda, ese día comenzarán las reuniones preparatorias de la conferencia, que se celebrarán a puerta cerrada.