BOGOTA.- La guerrilla marxista colombiana de las FARC desafió este jueves a la comunidad internacional, que apoya el proceso de paz en que está involucrada con el Gobierno de Colombia, al requerir de la ONU una explicación sobre su supuesta falta de neutralidad tras reivindicar el secuestro de un ex gobernador que se desplazaba en un vehículo del organismo internacional.
En una declaración pública, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la guerrilla más antigua de América Latina y la más poderosa militarmente de Colombia, pidieron a la ONU una "explicación" por brindarle supuestamente proteción al ex gobernador del departamento del Meta (centro de Colombia), Alan Jara, al cual el pasado domingo sacaron a la fuerza de un vehículo del organismo para secuestrarlo.
Esa acción del grupo insurgente provocó el rechazo del secretario general de la ONU, Koffi Annan, quien acusó a las FARC de violar la inmunidad de la organización, al asaltar el vehículo claramente identificado con las siglas del organismo y matrículas diplomáticas.
Además, Annan advirtó que esa acción del grupo rebelde "amenaza seriamente la capacidad de la organización para realizar su trabajo en Colombia". Pero las FARC hicieron caso omiso al pronunciamiento de Annan, y por el contrario, cuestionaron la imparcialidad de la ONU dentro del conflicto armado interno de Colombia, pues aseguraron que el ex gobernador es un paramilitar y lo acusaron de ser el "autor intelectual" de un "sinúmero de asesinatos selectivos".
Aún más, las FARC anunciaron un "juicio popular" contra Jara, de cuyo estado de salud y situación no dieron cuenta. El Gobierno del Presidente Andrés Pastrana, con el que las FARC lleva a cabo desde hace dos años y medio un diálogo de paz sin mediar un cese del fuego, aún no se ha pronunciado sobre la declaración del grupo insurgente, pero el comandante de las Fuerzas Militares, el general Fernando Tapias, la calificó de "cínica".
Tapias dijo a periodistas que el "comunicado de las FARC lleva implícito un alto grado de cinismo, pues no solo han violado la inmunidad diplomática de la ONU sino que desconocen la labor de este organismo en la protección de las personas".
Este incidente protagonizado por las FARC -que involucra directamente al principal organismo que representa a la comunidad internacional- se produce luego de que la semana pasada la organización internacional defensora de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) las acusara de violar sistemáticamente el Derecho Internacional Humanitario (DIH).
Pese al pronunciamiento público de HRW, dirigido directamente al líder y fundador de las FARC, el septuagenario Manuel Marulanda ("Tirofijo"), este negó conocerlo y hasta la fecha no lo ha respondido.
Hasta esta acusación de HRW contra las FARC, el grupo insurgente permanentemente aludía a los informes de la organización internacional en los que se acusaba a los paramilitares de violar los derechos humanos en Colombia, para sustentar sus recriminaciones que en este sentido hace contra el gobierno de Pastrana y justificar sus intermitentes alejamientos de las mesa de los diálogos de paz.
Otro hecho reciente que ha puesto a las FARC en entredicho frente a la comunidad internacional se registró el miércoles, cuando al parecer un comando de ese grupo rebelde secuestró a tres ciudadanos alemanes que trabajan en el sur del país con comunidades indígenas en la sustitución de cultivos ilícitos.
Este jueves, el Ministerio de Relaciones Exteriores colombiano, en un comunicado de prensa, rechazó "enérgicamente" el secuestro y aseguró que "acciones de esa naturaleza no corresponden al generoso apoyo de la comunidad internacional al desarrollo de los proyectos que se adelantan en el país y que contribuyen al proceso de paz".
