TETOVO, Macedonia.- La ira contra Occidente y los disturbios callejeros en Macedonia han debilitado al máximo las perspectivas de un fin pacífico a los problemas étnicos de esta república de la antigua Yugoslavia.
Turbas de la mayoría macedonia recorrieron el martes por la noche la capital Skopje para ventilar su indignación contra las potencias occidentales y las organizaciones internacionales, a las que el gobierno acusa de respaldar a los rebeldes de etnia albanesa y dividir a Macedonia en dos.
Las calles de Skopje estaban tranquilas el miércoles por la mañana mientras comenzaban los trabajos de limpieza de cristales rotos en el exterior de las embajadas de Estados Unidos y Gran Bretaña, las oficinas de los observadores internacionales de paz y los negocios extranjeros acosados por los manifestantes nacionalistas.
Tetovo, un poblado predominantemente albanés 40 kilómetros al oeste de Skopje, estaba también en calma después de una noche de intensos tiroteos, que causaron daños en vecindarios libres hasta ahora de la violencia con fuego de ametralladoras y morteros.
Los observadores internacionales de una tregua prácticamente fracasada después de tres días de combates, dijeron que su misión en Macedonia no ha concluido, pero tomaron nuevas precauciones después de la violencia.
"No creemos que sea necesario irse de aquí por una multitud de vándalos descontrolados, pero nos hubiese gustado ver que las fuerzas de seguridad hicieran más para frenarlos", dijo Carlo Ungaro, embajador de la Organización para la Seguridad y la Cooperación Europea (OSCE).
Hombres armados con garrotes entraron en el estacionamiento de su misión, incendiaron tres vehículos y causaron estragos en el edificio de la OSCE. La Misión de Observadores de la Unión Europea y la Cruz Roja dijeron que restringirán sus movimientos, pero no abandonarán el país.
Agenda nacionalista
Según los diplomáticos, todo aparenta que el gobierno sigue una agenda directamente nacionalista en lugar de otorgar mayores derechos a la gran minoría albanesa y asegurar un acuerdo de paz que ponga fin a una rebelión de cinco meses que está arrastrando a Macedonia a una guerra civil.
El director del hospital de Tetovo dijo que tres agentes de seguridad y cuatro civiles fueron atendidos de heridas recibidas en los combates del martes, que se acercaron al centro de la ciudad.
Los disturbios de Skopje, que siguieron a críticas del gobierno contra los mediadores occidentales y la OTAN fueron la peor muestra de violencia nacionalista en la capital en un mes.
Manifestantes de la región de Tetovo trataron de entrar en el edificio del parlamento en Skopje para demandar que el ejército aplaste a los rebeldes.
La policía se mantuvo a distancia e hizo muy poco para detener los disturbios, alentado por profundos temores de los macedonios a que su pequeño país de sólo 10 años de fundado sea dividido por los rebeldes y su naciente identidad quede cuestionada.