LIMA.- El depuesto presidente de Perú Alberto Fujimori afirmó desde Tokio que el nuevo Mandatario del país, Alejandro Toledo, recibirá este sábado un país que ya tiene cimentadas "bases sólidas" para construir su desarrollo.
En un mensaje dirigido a sus compatriotas en el día nacional de Perú a través de su página web de Internet, Fujimori afirmó que celebra esta jornada con nostalgia por estar lejos de su país, y expresó su deseo de "que Perú siga construyendo su propio camino hacia el futuro".
Tras afirmar que "la historia es justa, y ella tiene su veredicto y un lugar para mi gestión'', expresó su satisfacción por "haber dejado una herencia positiva, no una herencia mortal como la que me dejaron".
Recordó que el 28 de julio de 1990 tomó las riendas "de un país arruinado, colapsado" y en el que "la galopante hiperinflación, el terrorismo, la extrema pobreza, el permanente riesgo de la guerra, son sólo algunos títulos en la larga lista que heredé".
"Este 28 de julio es distinto; mi Gobierno, con errores que reconozco, dejó cimentadas las sólidas bases para el desarrollo y para un Perú posible", agregó.
Alberto Fujimori también afirmó que hoy "Perú entra en una nueva etapa gracias al esfuerzo de cada uno de los peruanos para salir del oscuro túnel que atravesábamos al inicio de los 90" y que "en esta nueva etapa de la consolidación definitiva del país, estaré atento en la defensa de los derechos del pueblo".
Tras saludar a los peruanos, ratificó su respaldo a las tres únicas congresistas de su partido en el actual Congreso, Carmen Lozada, Luz Salgado y Martha Chávez, a quienes calificó de "mujeres de gran valía".
Saludó además "a todas aquellas personas valientes que expresan y defienden sus ideales, pese a la hostil persecución", y les pidió que "no se amilanen". Finalmente, solicitó a sus adversarios políticos "que han vuelto al gobierno después de 10 años", que reflexionen sobre su labor, y señaló que "el pueblo les dio el respaldo para hacer política, pero sobre todo para hacer Perú".