LIMA.- Unos 300 reclusos se amotinaron este lunes en una cárcel del sur de Perú a raíz de la muerte de un preso en circunstancias confusas y reclamando un mejor trato de parte de las autoridades penitenciarias, informó una fuente de la policía regional.
El motín se produjo en la cárcel de San Antonio de Pocollay, en el departamento de Tacna, extremo sur de Perú y fronterizo con Chile, y fue controlado por la policía que disuadió a los internos a deponer su actitud de rebeldía, informó una fuente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE).
Los presos treparon a la parte alta de los pabellones que ocupan donde quemaron colchones y lanzaron gritos exigiendo que se esclarezca la muerte de uno de los presos que, según los internos, habría perecido en la víspera por maltratos de los custodios del presidio.
Sin embargo, las autoridades señalaron que la muerte podría haberse producido por una riña entre internos.
Tras negociaciones entre los presos y funcionarios del INPE el motín acabó en forma pacífica luego de varias horas con el acuerdo de que se investigue el fallecimiento del interno y que se concedan mejoras tanto en el trato como en la alimentación a los reclusos.
