SKOPJE.- El primer ministro macedonio, Llubcho Gueorguievski, acusó hoy a la fuerza de la OTAN en Kosovo, KFOR, de no "hacer nada" para impedir ataques de los extremistas albaneses en territorio macedonio desde esa provincia, administrada por la ONU.
También acusó a la guerrilla separatista albanesa de no querer la paz ni el acuerdo que mañana, lunes, firmarán los políticos eslavos y albaneses en un intento de solucionar la crisis, que desde su inicio el pasado febrero amenaza con degenerar en una guerra civil.
"Es un precedente jamás visto en la política internacional que un país soberano y democrático sea objeto de una agresión que se comete desde un protectorado internacional", afirma Gueorguevski en una carta al secretario general de la ONU, Kofi Annan.
El primer ministro macedonio asegura en la misiva que unos 600 miembros del Cuerpo de Protección de Kosovo (integrado por ex guerrilleros albano-kosovares) participaron ayer y hoy en los ataques de la guerrilla contra las Fuerzas de Seguridad macedonias en la aldea de Radusha, en la zona norte fronteriza con Kosovo, y en otros puntos de la zona.
Nueve policías macedonios resultaron heridos ayer en los enfrentamientos de Radusha, uno de ellos de gravedad.
Hoy se reanudaron los combates en Radusha y en la aldea de Lluboten, al norte de Skopje, pero han amainado durante la tarde.
Gueorguevski afirma que las fuerzas macedonias fueron atacadas con armas de artillería instaladas en territorio kosovar, por lo que, asegura, "para mí eso representa la declaración oficial de la guerra por parte del Cuerpo de Protección de Kosovo".
"Estoy muy preocupado por la pasividad de la KFOR que (...) no hace absolutamente nada para proteger la frontera e impedir la agresión", insiste el primer ministro macedonio en su carta a Annan.
Critica también en la misiva al administrador de la ONU en Kosovo, Hans Haekkerup, y pide al secretario general de la ONU que "investigue su papel y estudie la posibilidad de destituirle".
Skopje ha denunciado en varias ocasiones en los últimos seis meses, desde que se desencadenó la crisis en Macedonia tras la aparición de la guerrilla albanesa en el norte y noroeste del país, que los extremistas armados reciben apoyo desde Kosovo.
El portavoz de la OTAN en Skopje, Bery Johnson, aseguró hoy que "no hay información de que formaciones, pequeñas o grandes, se desplacen en Kosovo hacia el sur (Macedonia) para participar en los combates que se libran en los últimos días".
Un agravamiento de la situación se ha registrado en Macedonia desde que el pasado miércoles los principales líderes políticos de la mayoría eslava y de la minoría albanesa pactaran un acuerdo de paz, que se espera que sea firmado el lunes.
El acuerdo, alcanzado tras días de intensas negociaciones, con mediación occidental y sin la participación de la guerrilla, supone realizar reformas constitucionales para satisfacer los derechos de la minoría albanesa, en torno a una cuarta parte de la población.
En los últimos cinco días, una veintena de personas, 18 de ellas soldados macedonios, han muerto a causa de los enfrentamientos, pese a estar en vigor un alto el fuego entre la guerrilla y el Gobierno, logrado con mediación de la OTAN.
"Macedonia firmó el 5 de julio pasado el acuerdo de alto el fuego para dar una oportunidad a la paz y a la política", subraya el primer ministro macedonio, quien asegura en la carta a Annan que el objetivo de la guerrilla albanesa es crear la Gran Albania.
