GAZA.- Aviones israelíes F-16 dispararon cohetes y destruyeron edificios de seguridad palestina en tres pueblos palestinos en la madrugada del domingo, en una serie de ataques en represalia después de la muerte de cinco israelíes un día antes.
Los misiles provocaron una estruendosa explosión y columnas de humo negro ascendían desde lugar donde estaban situados los cuarteles de policía en el centro de Gaza alrededor de las 5 de la mañana (0200 GMT). Por lo menos tres policías fueron heridos, dijeron médicos de un hospital.
Los aviones también bombardearon las oficinas de Inteligencia Militar en Deir el-Balah, al sur de Gaza, y los cuarteles policiales de Salfit, en Cisjordania, dijeron militares israelíes. Los aviones hicieron disparos directos en los tres ataques, agregaron los militares.
Las incursiones aéreas se produjeron un día después que militantes palestinos mataron a tres soldados en un osado ataque contra un puesto de vigilancia del ejército en el sur de la Franja de Gaza. Asimismo, una pareja israelí fue asesinada y una tercera persona resultó herida en el ataque de un disparo a la cabeza cuando su automóvil fue emboscado por hombres armados, al norte de Jerusalén, dijeron fuentes de un hospital. El ejército informó previamente de tres muertos en la emboscada.
La Brigada de Mártires Al Aqsa, conformada por militantes relacionados con el movimiento Fatah del dirigente palestino Yasser Arafat, se responsabilizó del ataque. La muerte de seis israelíes fue una de las más numerosas en un solo día, dentro de los 11 meses de conflicto con los palestinos.
Los israelíes tomaron brevemente el control de varias pequeñas instalaciones de seguridad palestinas, mientras las apisonadoras destruían el cuartel de la agencia de Seguridad Pública Palestina, de acuerdo con pobladores del área y el gobernador de Rafah, Majid Al-Ajha.
Los tanques y transportes de tropas fueron recibidos con fuego de armas palestinas, respondiéndolo con bombas de artillería y ametralladoras. El sargento de policía Alla Abu Bakra murió al ser alcanzado por esquirlas y al menos otros dos palestinos resultaron lesionados, dijeron fuentes médicas.
En las mezquitas de Rafah, se hicieron llamados por medio de altavoces para unirse a una "guerra santa" contra las fuerzas de Israel. Alrededor de las 3:00 de la mañana del domingo, los israelíes empezaron a retirarse de Rafah, dijeron funcionarios y pobladores locales.
En el lado este de la ciudad de Gaza, las fuerzas de Israel derribaron dos estaciones de policía palestina, dijeron fuentes de seguridad palestina. Al menos una media docena de helicópteros sobrevolaron mientras tanto los cuarteles de Arafat en Gaza, pero se fueron sin realizar un solo disparo.
La violencia disminuyó las posibilidades de que se reanuden las conversaciones para una tregua, además de incrementar la violencia sobre el primer ministro Ariel Sharon para responder a los ataques con acciones militares.
"Ya sea atacando a soldados israelíes en Gaza o a civiles en los caminos cercanos a Jerusalén, Yasser Arafat ha incrementado su guerra de terrorismo en contra del estado de Israel", dijo el vocero gubernamental Dore Gold.
Los militantes palestinos han atacado a tropas israelíes y colonos judíos en Gaza durante los 11 meses de violencia intensificada en Oriente Medio. Sin embargo, el ataque del sábado fue uno de los más abiertos y mortíferos a la fecha, dado que generalmente los militantes atacaban desde la distancia o realizaban emboscadas en los caminos.
El asalto contra la posición fortificada israelí ocurrido a las 3 de la mañana del sábado, reivindicado por el grupo radical Frente Democrático para la Liberación de Palestina, pareció tomar a los guardias israelíes bajo sorpresa.