BOGOTA.- Tropas del Ejército y grupos guerrilleros sostuvieron cinco combates en las últimas 24 horas con un saldo de por lo menos 28 guerrilleros y cinco militares muertos, informaron el jueves fuentes oficiales.
El mayor combate se registró en cercanías del municipio Ibagué, 105 kilómetros al oeste de Bogotá, donde murieron 12 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y seis militares, informó en rueda de prensa el general Fernando Tapias, comandante de las fuerzas armadas.
Otros combates en zona rural de Dagua, a unos 300 kilómetros al suroeste de la capital, dejaron otros 10 guerrilleros de las FARC muertos, agregó Tapias.
El informe indica que dos rebeldes murieron en las cercanías de Cocorná, a 165 kilómetros al norte de Bogotá.
Las FARC también atacaron en la noche del miércoles a Sativanorte, a 220 kilómetros al noreste de Bogotá, donde un carro-bomba que al explotar dio muerte a un policía e hirió a otro, informó a la AP el coronel Jaime Otero, comandante de la Policía en el Departamento de Boyacá.
En el ataque participaron unos 150 guerrilleros que además utilizaron cilindros de gas cargados de explosivos que destrozaron en un 70% la estación de policía y causaron daños en viviendas cercanas.
Y, prosiguiendo la operación siete de agosto del ejército, con apoyo aéreo al sur del país desde hace dos semanas, también cayeron el jueves otros dos insurgentes de las FARC y nueve mas fueron capturados. Los combates en la zona continúan, señaló el militar.
Tapias, aseguró que se halló una fosa común con cuatro cadáveres, entre los que se encuentra el cuerpo de Sandra Rodríguez, "persona cercana a los miembros del secretariado de las FARC".
Asimismo, se han decomisado 37 toneladas de víveres,30 fusiles, 58 granadas, dos bazucas, un mortero de 60 milímetros, 12.000 cartuchos, 170 uniformes, de los cuales 40 son de fabricación venezolana y otros pertrechos de guerra.
Los rebeldes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ubicaron tres carros bomba en dos municipios a unos 310 kilómetros al nordeste y norte de Bogotá, que fueron desactivados por expertos del ejército.
El ELN, la segunda guerrilla de Colombia, lanzó una ofensiva terrorista a raíz de la ruptura de diálogos con el Gobierno del presidente Andrés Pastrana anunciada el 7 de agosto. Desde entonces han muerto siete personas y 93 heridas.
