BAGDAD.- Las autoridades de Irak comunicaron a la ONU que cinco de sus empleados dedicados a labores humanitarias deberán abandonar el país antes de 72 horas, "por su implicación en actividades que pueden dañar la soberanía del país", informó una fuente del Ministerio de Asuntos Exteriores en Bagdad.
"Irak tiene pruebas suficientes para asegurar que estas personas llevan a cabo actividades contrarias a su misión en el país", señaló la fuente, quien precisó que los expulsados son tres hombres y una mujer de nacionalidad nigeriana, y una mujer bosnia.
Aunque la fuente no precisó cuáles eran las labores dañinas, en ocasiones anteriores Bagdad utilizó esa expresión para referirse a casos de espionaje.
Las Naciones Unidas pidieron a Bagdad que retrasara la expulsión de sus cinco empleados, pero la petición fue rechazada por el Gobierno iraquí, agregó la fuente de Exteriores.
Los cinco empleados expulsados forman parte del personal de la ONU que trabaja en la aplicación del acuerdo de intercambio de "petróleo por alimentos", que permite a Irak adquirir mercancías de primera necesidad a cambio de sus ingresos por la exportación de crudo, bajo el control de las Naciones Unidas.
Desde que las tropas de Bagdad ocuparon Kuwait, en agosto de 1990, Irak está sometido a un estricto embargo internacional.
Los soldados iraquíes fueron expulsados del emirato a principios de 1991 por una coalición internacional encabezada por Estados Unidos.