DURBAN, Sudáfrica.- Las negociaciones en curso en la Conferencia de la ONU contra el Racismo en Durban, son "muy difíciles" y un acuerdo final es incierto, declaró este viernes por la noche en la ciudad sudafricana el ministro belga de Relaciones Exteriores, Louis Michel, cuyo país ejerce la presidencia rotativa de la UE hasta fin de año.
"En este momento es muy difícil, no sé si habrá un acuerdo", declaró Michel, quien lidera las negociaciones del lado europeo.
Declarándose "un poco decepcionado", el representante europeo indicó que las negociaciones todavía continuaban, por ejemplo sobre la cuestión de la esclavitud, mientras que la conferencia de la ONU debería haber terminado más temprano este viernes.
Michel indicó que se quedaría en Durban hasta el sábado por la mañana, ya que "perdí mi avión" del viernes por la noche. En lo referido a las negociaciones sobre una propuesta de texto de compromiso sobre la esclavitud, la colonización y eventuales reparaciones presentada por la presidencia sudafricana de la conferencia, Michel estimó que "el trabajo avanzó considerablemente".
"La Unión Europea dio importantes pasos para resolver ese punto muy importante" y está "lista a hacer todos los esfuerzos para lograr un éxito", declaró.
Michel estimó que la Conferencia había sido la ocasión para la UE de "hacer un acto de fuerte arrepentimiento", cuando uno de los puntos conflictivos en las discusiones es la exigencia de "excusas" por parte de los países africanos por la esclavitud y la colonización.
"Poco importa que para algunos ese arrepentimiento se llame pesar, para otros remordimientos o para otros excusas. Lo importante en esta confesión es el reconocimiento de una injusticia, que aquellos que son de una forma herederos del pasado asuman sus responsabilidades", declaró Michel.
Sobre el pedido de reconocimiento de la esclavitud como crimen contra la humanidad, el ministro belga insistió sobre la diferencia de época y de mentalidades. "La esclavitud es un fenómeno inaceptable e injustificable", dijo Michel, aunque agregó que "en ciertas épocas" no era considerado como crimen contra la humanidad.
El segundo gran punto conflictivo de la Conferencia de Durban es el tema de Medio Oriente y de la condena de Israel que querían los palestinos y sus aliados árabes.
Fuentes árabes afirmaron este viernes por la noche que no rechazarían un texto de compromiso propuesto por la presidencia sudafricana, pese a mantener la ambigüedad sobre enventuales enmiendas, dando a entender que su actitud dependería del resultado de las negociaciones UE-Africa sobre la esclavitud.
