BRUSELAS.- Los ministros de Exteriores de la Unión Europea manifestaron el sábado su apoyo a una fuerza internacional a más largo plazo en Macedonia, después que termine la actual misión de la OTAN.
La OTAN dijo que sus 4.500 soldados abandonarían el pequeño estado balcánico cuando hayan terminado la recolección de armas entregadas por miembros de la etnia albanesa. Su misión tiene como fecha límite el 26 de septiembre.
"Nuestras tropas podrían quedarse (en Macedonia) durante dos o tres meses más", declaró a periodistas el ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, tras su llegada a la ciudad belga de Genval para un encuentro de dos día con los cancilleres del organismo.
La UE, cuyos estados miembros forman el grueso de la actual fuerza de la Organización el Tratado del Atlántico Norte (OTAN), lidera los esfuerzos diplomáticos para conseguir un acuerdo de paz entre el gobierno macedonio y la etnia albanesa del país balcánico.
"Analizaremos las posibilidades para evitar un vacío de seguridad (...), después de que las tropas de la OTAN hayan completado su misión", declaró el jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, que acaba de regresar de una misión de dos días en Macedonia.
"Europa se mantendrá involucrada en todos los campos, económicamente, políticamente y en el campo de la seguridad", agregó.
Asimismo, dijo que los ministros no tomarían ninguna decisión hasta el sábado.
La parte principal de las conversaciones sobre Macedonia se ha trasladado del sábado al domingo, para permitir que el ministro belga de Exteriores, Louis Michel --cuyo país desempeña la presidencia semestral de la UE--, pueda volver de la cumbre sobre el racismo que celebra las Naciones Unidas en Sudáfrica.
El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Joschka Fischer, cuyo país ha contribuido con 500 tropas a la misión de la OTAN, dijo a periodistas que cualquier misión nueva debería estar organizada conforme la resolución de las Naciones Unidas.
"La situación es muy frágil. Necesitamos más participación", añadió.
A principios de esta semana, el Parlamento de Macedonia, bajo fuerte presión de la OTAN y de la UE, aprobó por escaso margen un paquete de reformas destinado a otorgar mayores derechos constitucionales a la etnia albanesa.