ISLAMABAD.- Los bombardeos de EE.UU. continúan sobre Kabul, donde se suceden los impactos, los fogonazos y las explosiones, a las que están respondiendo las defensas antiaéreas del régimen de los talibán, según el corresponsal de la televisión qatarí "Al Yazira" en la capital de Afganistán.
Los ataques, que "están golpeando muy fuerte en la ciudad", se han dejado sentir con mayor intensidad en la zona noroeste de la capital, donde está situada la emisora Radio Kabul, añadieron las fuentes.
También se han escuchado impactos de artillería pesada, aunque no en la misma capital afgana, sino en las afueras de Kabul.
A pesar de que los bombarderos de EE.UU. han atacado la zona de las defensas talibán, éstas parecen seguir funcionando a pleno rendimiento, según "Al Yazira".
La capital afgana ha sufrido un nuevo corte de energía eléctrica que ha dejado la ciudad a oscuras, como ya ocurrió durante los dos anteriores ataques nocturnos de las fuerzas estadounidenses.
La televisión añadió que los talibán han comenzado a disparar misiles tierra-aire contra los aviones estadounidenses, que vuelan a gran altura, aunque no se ha informado de si han impactado en los blancos.
Los bombardeos también han afectado en las últimas horas a la ciudad de Kandahar, donde reside el máximo líder de los talibán, el "mulá" Mohamed Omar quien, según los talibán, se encuentra a salvo.
Herat, ciudad cercana a la frontera iraní, también recibió hoy un ataque de las fuerzas estadounidenses que podría haber afectado a una instalación aeroportuaria.
Hasta el momento, ninguna fuente oficial afgana ha informado sobre bajas en el Ejército de los talibán.
Fuerzas británicas no participaron en tercera noche de bombardeos
Las fuerzas británicas no han participado en la tercera noche de bombardeos contra Afganistán y se han limitado a prestar ayuda logística a las de Estados Unidos, confirmó hoy el ministerio de Defensa británico.
"Sólo hemos aportado aviones cisterna para abastecer de combustible a las fuerzas estadounidenses", señaló un portavoz oficial.
Desde Washington, el secretario de Defensa de EE.UU., Donald Rumsfeld, ha corroborado que los ataques aéreos contra Afganistán se han reanudado por tercera noche consecutiva y pueden mantenerse de forma "más o menos ininterrumpida".
Hasta ahora, la única intervención del Reino Unido en los ataques liderados por Estados Unidos se produjo el pasado domingo, día de la primera oleada de bombardeos, con la participación de submarinos lanzamisiles.
Primeros ataques diurnos
Las fuerzas norteamericanas llevaron hoy a cabo los primeros ataques diurnos contra Afganistán desde el comienzo, el pasado domingo, de la operación "Libertad Duradera".
Los ataques de la pasada noche se concentraron sobre los centros de mando y telecomunicaciones de las fuerzas talibán, en especial en Kabul y en las ciudades de Jalalabad (este del país) y Kandahar (sur).
Apenas despuntaba el día cuando las baterías antiaéreas de los talibán entraron en funcionamiento ante la aparición de varios aviones no identificados que volaban en círculos sobre Kandahar, el cuartel general del grupo ultraintegrista afgano y donde reside su líder supremo, el "mulá" Mohamed Omar.
Casi al mismo tiempo, en Kabul se oyeron varias explosiones y varias baterías antiaéreas abrieron fuego, sobre todo en el norte de la ciudad, donde se encuentra el aeropuerto, que volvió a ser blanco de la aviación norteamericana, como en los dos días precedentes.
Según han indicado portavoces de los talibán desde Kabul y luego ratificó su embajador en Islamabd, el "mulá" Abdul Salam Zaeef, los ataques "no han afectado a objetivos militares".
El "mulá" Salam Zaeef señaló que el sistema de comunicaciones de los talibán funciona con normalidad y no ha resultado dañado por los bombardeos, al tiempo que subrayó que "no se han registrado bajas en nuestras filas".
Igualmente, el embajador talibán en Afganistán desmintió que se estén produciendo deserciones masivas desde las filas de sus tropas a las de la opositora Alianza del Norte.
"Esos rumores no son más que propaganda; los talibán son combatientes musulmanes y la oposición no representa al pueblo musulmán", afirmó.
Asimismo, Salam Zaeef declaró que tanto el "mulá" Mohamed Omar como el saudí Osama Bin Laden -acusado por Estados Unidos de los atentados del pasado 11 de septiembre y contra quien finalmente va dirigida esta campaña- "se encuentran vivos".
Cuatro funcionaros de la ONU mueren en ataque
Por otra parte, la ONU confirmó hoy la muerte anoche de cuatro trabajadores afganos de la organización durante los bombardeos que efectuó la aviación norteamericana contra Kabul y otras ciudades de Afganistán.
Los cuatro trabajadores, miembros de la organización Afghan Tecnical Consulting, asociada a la ONU, fallecieron a causa de una explosión que se produjo en las dependencias de ese organismo en Kabul, indicaron los representantes de Naciones Unidas en Islamabad.
Los portavoces de las agencias de la ONU en la capital de Pakistán no precisaron si la explosión que acabó con la vida de los cuatro trabajadores afganos se debió al impacto de alguna bomba lanzada por la aviación norteamericana.
Asimismo, la portavoz de la Oficina de la ONU para la Coordinación de la Ayuda Humanitaria en Afganistán (OCHA), Stephanie Bunker, manifestó que otros cuatro trabajadores resultaron heridos leves a causa de la explosión.
Fuentes del hospital Waziz Akbar Khan de la capital afgana manifestaron que las víctimas murieron sepultadas por los escombros del edificio de dos plantas en que se encontraban las oficinas de su organización.
Al menos dos bombas cayeron anoche en el aeropuerto de Kabul, y otras tantas en la colina donde encuentra la mayor antena repetidora de radio y televisión, según medios afganos captados en Islamabad que citaron a testigos presenciales.
El objetivo de Kandahar parece ser, además del centro de mando de los talibán, la reserva de armamento pesado, consistente sobre todo en carros de combate y una exigua aviación, que según algunos expertos occidentales en defensa no pasaría de una veintena de aviones, modelo Mig de fabricación rusa, bastante obsoletos y en mal estado de conservación.
En el segundo ataque se emplearon misiles "tomahawk", lanzados desde barcos situados en el Mar Arábigo, además de aviones de combate, como cazabombarderos y aparatos de ataque a tierra y anticarro.
Por otro lado, la Alta Comisaría de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) advirtió del futuro peligro que supone para la población el hecho de que no haya estallado entre el 10 y el 30 por ciento de los proyectiles que desde el domingo se lanzan sobre Afganistán.