BERLIN.- El presunto terrorista libio Laset Ben Heni, detenido ayer en Múnich en respuesta a una orden de captura de la Fiscalía de Milán, ha rechazado las acusaciones que se le imputan pero está dispuesto a que se le extradite a Italia.
El Ministerio de Justicia bávaro informó hoy de que decidirá sobre su entrega a las autoridades italianas en coordinación con el Gobierno federal, una vez reciba del tribunal territorial de Múnich los documentos necesarios para este trámite.
A Ben Heni, de 32 años, se le atribuyen vínculos con Al Quaeda, la organización del multimillonario saudí Osama Bin Laden, así como falsificación de documentos y complicidad en redes de tráfico de personas.
La justicia italiana había dictado orden internacional de captura contra él, supuestamente relacionado con los otros tres presuntos miembros de una célula terrorista islámica que fueron detenidos también el miércoles en Milán.