JERUSALEN.- Israel suspendió este sábado la programada retirada de sus tropas de la ciudad cisjordana de Belén y de un poblado palestino vecino debido a los actos de violencia registrados en la mañana y tarde de hoy.
"La retirada ha sido suspendida como resultado de los continuos ataques palestinos, los incesantes tiroteos durante el día y la falta de implementación del acuerdo alcanzado con las fuerzas de seguridad palestinas en Beit Jala y Belén", dijo a Reuters un portavoz del Primer Ministro israelí, Ariel Sharon.
Fuertes enfrentamientos estallaron el sábado en Belén y en la cercana Naplusa, controlado por la Autoridad Palestina, cuando faltaban sólo horas para concretarse la anunciada primera fase de una retirada gradual de Israel de las áreas palestinas ocupadas la semana pasada.
El negociador palestino Saeb Erekat dijo a Reuters que la postergación mostraba que Sharon desea "continuar el camino de destrucción y violencia y no el camino de negociaciones y paz. Es desafortunado una vez más que el gobierno israelí reniegue de un acuerdo forjado por los estadounidenses, los europeos, las Naciones Unidas y Rusia. Está muy claro que ahora depende de Estados Unidos y de los europeos detenerlo", dijo, refiriéndose a Sharon.
Una fuente israelí de seguridad de alto rango declaró a Reuters que Israel volvería a examinar su decisión sólo "si los palestinos mantienen la calma y sus compromisos".
Las tropas israelíes incursionaron en seis áreas palestinas tras el asesinato, el 17 de octubre, del derechista ministro israelí de Turismo, Rehavam Zeevi.
Cifras de muertos se incrementan
Un poco antes, este mismo sábado, tropas israelíes mataron a un activista de la facción Al Fatah a la que pertenece el Presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, durante un incursión de sus tanques en el centro de la ciudad cisjordana de Tulkarem, indicaron fuentes de un hospital palestino.
Firas Jaber, de 24 años, murió después que tres tanques israelíes entraron cerca de un kilómetro en Tulkarem, desatando una violenta batalla con hombres armados, dijeron las fuentes y testigos. Los tanques dispararon proyectiles, indicaron, información que está siendo investigada por el ejército israelí.
En Belén, también el sábado, un tanque israelí lanzó al menos cuatro misiles durante intensos combates con palestinos armados en Belén.
Testigos dijeron que el ataque israelí hizo correr a los palestinos a protegerse en callejones en una intersección entre Belén y la ciudad palestina de Beit Jala.
El ejército israelí dijo que sus tropas habían usado "armamento ligero" durante confrontaciones que ocurrieron después que fueron atacados por palestinos armados.
Los mismos testigos agregaron que los palestinos, armados con ametralladoras pesadas, tomaron posiciones en las calles de Belén y dispararon a un edificio donde suponían que se encontraban efectivos encubiertos israelíes.
No fue posible confirmar de inmediato la presencia de soldados israelíes en el edificio.
Los hombres armados y testigos dijeron que los soldados israelíes tenían a varios palestinos como rehenes en el edificio.
Horas después de los enfrentamientos se vio a soldados israelíes abandonar apresurados el edificio y marcharse en vehículos militares. Tras la partida de los efectivos se vio a varios palestinos en la puerta del edificio.
En las primeras horas del día, testigos habían informado de tiroteos y fuego de artillería de un tanque israelí contra el campo de refugiados Aza, en Belén, pero el ejército israelí dijo desconocer algún incidente en el lugar.
En otro incidente de violencia registrado el sábado, palestinos armados intercambiaron disparos con el ejército israelí cerca del asentamiento judío de Elon Moreh, cercano a la ciudad palestina de Naplusa.
Más de 40 palestinos y un israelí han muerto desde el asesinato de Zeevi, que fue llevado a cabo para vengar el asesinato del líder del extremista Frente Popular para la Liberación de Palestina.
Al menos 678 palestinos y 177 israelíes han muerto desde el inicio de la nueva rebelión palestina contra la ocupación israelí, hace más de un año, después del estancamiento en las negociaciones de paz.