ROMA.- Durante su visita a Roma, el líder palestino Yasser Arafat exhortó hoy al primer ministro de Israel, Ariel Sharon, a regresar a la mesa de negociaciones para poner fin al conflicto en Cercano Oriente.
En una entrevista concedida a la radiotelevisión italiana RAI antes de reunirse con el Papa Juan Pablo II y el premier italiano Silvio Berlusconi, Arafat consideró que la reanudación de las negociaciones debe producirse "sin condiciones" y "sin presiones militares".
El Presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), cuya visita está rodeada de estrictas medidas de seguridad, se entrevistó durante 15 minutos con el jefe de la Iglesia Católica en el Vaticano, en la audiencia número 11 que el Papa concede a Arafat. La última vez que se reunieron fue en agosto pasado en la residencia veraniega de Castel Gandolfo, a las afueras de Roma.
Pese a que no se dio a conocer el contenido de la entrevista, el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro-Valls, señaló que el Papa llamó a las partes en conflicto a abandonar las armas inmediatamente y a retomar el camino del diálogo.
"El Santo Padre ha repetido la posición de la Santa Sede, que privilegia el diálogo y el cumplimiento del Derecho Internacional sin olvidar el empeño necesario de la comunidad internacional por asegurar los pueblos de la región el respeto recíproco y la seguridad para todos", agregó.
Navarro-Valls afirmó además que Arafat puso de manifiesto durante la entrevista el deseo de paz de la población palestina y que condenó toda expresión de terrorismo.
El Vaticano, para allanar el camino a una solución al conflicto en la región, reclama un estatuto internacional para Jerusalén con el argumento de que la ciudad alberga santuarios religiosos de los judíos, musulmanes y cristianos. Además, el Papa defiende resueltamente el derecho de los palestinos a una patria propia.
Tras reunirse con Juan Pablo II, Arafat almorzó con Berlusconi y posteriormente tenía previsto entrevistarse con el ministro del Exterior italiano, Renato Ruggiero.
Ayer, durante una visita oficial a Túnez, el presidente italiano, Carlo Azeglio Ciampi, dijo que ya había llegado la hora para la creación de un Estado palestino.