WASHINGTON.- El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y el primer ministro británico, Tony Blair, reiteraron hoy su determinación a continuar su estrategia de ataques sobre Afganistán, cuyo futuro político también están planeando.
Bush y Blair se reunieron hoy en la Casa Blanca para discutir la evolución de la campaña, que ha cumplido ya un mes, mientras en algunos países, incluido el propio Reino Unido, comienza a desvanecerse el apoyo a los bombardeos sobre suelo afgano.
"Estamos en una posición muy fuerte para continuar hacia adelante", declaró Blair tras la reunión bilateral, que se prolongará durante una cena.
Bush recalcó que "esta es una lucha que va a necesitar mucho tiempo", y pidió paciencia, aunque aseguró que el entramado de los talibanes "se está resquebrajando poco a poco".
El presidente estadounidense explicó que trató con Blair, su mejor aliado en este conflicto, los proyectos para reconstruir Afganistán una vez que se derribe al régimen talibán.
El objetivo es facilitar la creación de "un nuevo régimen que ofrezca un futuro digno a la población, en lugar de la represión de un régimen que se financia con el narcotráfico", indicó Blair.
La reunión de hoy forma parte de la intensa ronda de contactos que la Casa Blanca ha programado para esta semana, en un intento de renovar el apoyo internacional a la campaña afgana a pesar de la prolongación de los bombardeos.
Además, el primer ministro británico transmitió a Bush el firme apoyo de los principales gobiernos europeos.
Blair reunió el pasado fin de semana en Londres a los jefes de Gobierno de España, Francia, Alemania, Italia, Holanda y Bélgica, así como al Alto Representante de Política Exterior y Seguridad de la Unión Europea, Javier Solana.
"El compromiso es auténtico y la determinación es absoluta", dijo hoy Blair sobre la opinión europea tras esa reunión.