BRUSELAS, Bélgica.- El secretario general de la OTAN, George Robertson, inició este miércoles una misión para explorar la posibilidad de que la alianza occidental estreche las relaciones con Rusia, a fin de recompensar a Moscú por su nueva cooperación contra el terrorismo.
Sin embargo, pese a todas las palmaditas en la espalda de los últimos días entre los presidentes de Rusia y Estados Unidos, a algunos miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte les preocupan las reuniones de Robertson en Moscú con el ministro de Defensa Sergei Ivanov, el jueves, y con el Mandatario Vladimir Putin, el viernes.
Robertson tiene previsto visitar monumentos de la Segunda Guerra Mundial en Volgogrado, antigua Estalingrado, antes de dirigirse a la capital. Su visita se produce días después que el Primer Ministro británico, Tony Blair, propuso crear un nuevo organismo para profundizar la cooperación entre la OTAN y Rusia, tras los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos.
Los diplomáticos de Bruselas dijeron que la iniciativa de Blair contaba aparentemente con la aprobación de Washington, puesto que fue posterior al amistoso encuentro de la semana pasada entre Putin y el Presidente estadounidense, George W. Bush, en su rancho de Crawford, Texas.
El embajador estadounidense ante la alianza, Richard Burns, dijo este miércoles a los periodistas que Washington y Moscú querían una cooperación más productiva entre la OTAN y Rusia y una mayor coordinación en torno a temas políticos de envergadura "e inclusive la posibilidad de tomar decisiones de forma conjunta".
Funcionarios de la OTAN dijeron que ahora había más para unir a la OTAN y a Rusia que para dividirlas y la preocupación mundial sobre el terrorismo desde el 11 de septiembre había comunicado un fuerte mensaje al país.
"Hay una aceptación general en la alianza acerca de que necesitamos mejorar la relación", dijo un diplomático.
Aliados están cautelosos
"Como siempre, las nuevas ideas generan cierta cautela", dijo otro diplomático.
"Algunos funcionarios de gobierno (de la OTAN) preguntan si deberíamos tener relaciones con Rusia que pudieran hacer caer a la OTAN en el olvido, y todos quieren asegurarse de que esto es algo real", agregó.
La solidaridad de Putin con la guerra contra el terrorismo dio lugar a debates acerca de si Moscú algún día se uniría a la OTAN.
Sin embargo, las propuestas de Blair estuvieron lejos de convertir a Rusia en un miembro con poder de veto de la alianza de 19 miembros, o de integrarla al comando militar unificado.
En realidad, los analistas dijeron que era dudoso que los aliados, en particular, los países del bloque de la ex Unión Soviética, acordaran una expansión más allá de una cooperación práctica en temas como el antiterrorismo y operaciones de paz.