BOGOTA.- El gobierno colombiano criticó a este miércoles a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por exigir la excarcelación de un guerrillero a cambio de la liberación de un policía secuestrado, que es el padre de un niño que padece un cáncer terminal.
En uno de los capítulos más tristes del conflicto colombiano, el niño Andrés Felipe Pérez, de 12 años, ha manifestado públicamente su deseo de ver a su progenitor antes de morir.
"He insistido ante las FARC, desde hace tres meses, en la liberación del cabo (Norberto) Pérez como un acto humanitario, pero la guerrilla ha tomado el hecho como otro acto de negociación política inadmisible", dijo este miércoles el Comisionado de Paz, Camilo Gómez, a la radio Caracol.
Las FARC propusieron el viernes canjear el agente de policía secuestrado hace 20 meses por el guerrillero Ignacio González. Sin embargo, el gobierno alega que no existe la posibilidad de adelantar un canje por la asimetría de los casos.
Mientras el guerrillero fue capturado por cometer delitos, el policía fue secuestrado cuando defendía el puesto policial de Santa Cecilia, en el central departamento de Risaralda, ante una toma rebelde.
El Comisionado trató el martes el caso que ha remecido a los colombianos con los propios negociadores rebeldes, durante una breve visita a la zona desmilitarizada en el sur del país.
Gómez reiteró que sólo cabe una liberación unilateral del cabo, que fue excluido de un intercambio humanitario entre el gobierno y las FARC en junio pasado.
En virtud de ese canje fueron liberados 325 militares y policías y excarcelados 14 guerrilleros. Ataviado con una máscara de oxígeno y calvo por los efectos de la quimioterapia, Andrés Felipe regresó el martes a su casa en el poblado de Guadualejo, departamento del Valle del Cauca, a unos 270 kilómetros al suroeste de Bogotá.
Cientos de personas, entre ellas varios compañeros policías de su padre, salieron a recibir al pequeño que estuvo hasta ayer en la clínica de la Policía Nacional en Bogotá, donde recibió un tratamiento para combatir un cáncer renal con metástasis ósea y pulmonar.
Desde la Comisión Interamericana de Derechos Humanos hasta ciudadanos de Colombia y países vecinos han pedido a las FARC tener clemencia con el caso del Andrés Felipe.
Cientos de personas, entre ellas el ministro de Defensa y niños, han ofrecido canjearse por el padre de Andrés Felipe.