LA HAYA.- El ex Presidente yugoslavo Slobodan Milosevic comenzó su discurso de defensa este miércoles en La Haya, negando la legitimidad del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) que le juzga por crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y genocidio.
"Este tribunal no tiene competencia para juzgar", aseguró el ex Mandatario.
Milosevic, que escuchó sin pronunciar una palabra durante dos días las explicaciones del fiscal, prefirió dejar para el jueves el discurso en el que se defenderá de las acusaciones que se le imputan, pero quiso usar su derecho a hablar tan pronto como los jueces le dieron la oportunidad.
Como ya hizo en otras ocasiones, Milosevic reiteró que el TPIY no fue creado según las normas de justicia internacional y que, por lo tanto, su detención y su juicio son "ilegales".
Además, acusó a la fiscal general Carla del Ponte de "haber proclamado la sentencia" desde la apertura del proceso y criticó la campaña de los medios de comunicación en su contra.
El juez Richard May, que preside las audiencias, dejó que Milosevic hablara diez minutos y después le cortó el micrófono para clausurar la sesión.
Imperturbable ante macabra descripción de crímenes
El fiscal adjunto del Tribunal Penal Internacional (TPI), Dirk Ryneveld, describió los crímenes cometidos contra los albaneses de Kosovo entre 1998 y 1999 por los serbios a las órdenes de Slobodan Milosevic, quien asistió imperturbable a esta siniestra crónica de destrucción.
Asesinatos, desplazamientos forzosos, violaciones y devastación completa de localidades fueron orquestadas por el acusado, que en esta época era presidente de la República Federal Yugoslava (RFY), según Ryneveld, quien aseguró que el ministerio fiscal aportará las pruebas para sustentar estas acusaciones.
El letrado ofreció una lista detallada de estos crímenes, con nombres, fechas y lugares concretos. "El 28 de marzo de 1999, las fuerzas serbias atacan el pueblo de Izbica, situado en medio de un valle. Piden a 150 hombres que se sitúen alineados en las calles y dan las mujeres y niños la orden de abandonar la ciudad en dirección a Albania", cuenta el fiscal.
Los serbios ejecutaron a sangre fría a muchos de los hombres, dispararon sin piedad hacia las caravanas de mujeres y niños. En total 127 personas murieron. Un video muestra los cuerpos sin vida alineados, entre ellos el de un anciano con muletas.
"Sabemos que en Kosovo, la estrategia de los serbios fue enterrar los cuerpos de los civiles y después exhumarlos para que no fueran encontrados nunca ni hubiera pistas de sus crímenes", añadió.
Según el fiscal, sólo en la región de Izbica, gracias a los testigos, los forenses y las fotografías, se sabe que hubo al menos 139 cuerpos enterrados en fosas comunes que no fueron recuperados hasta hoy.
Milosevic siempre mantuvo que los bombardeos de la OTAN sobre Serbia en la primavera (boreal) de 1999 por su campaña en Kosovo tienen la culpa de este conflicto y nunca han sido investigados por el TPI.
Pero según Dirk Ryneveld, "los arquitectos de esta campaña de limpieza étnica se aprovecharon del bombardeo de la OTAN para intensificar sus acciones e intentaron culpar de ello a la comunidad internacional".
El acta de la acusación explica que Milosevic está acusado de crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra en Kosovo por haber participado en la "expulsión de una parte importante de la población albanesa fuera del territorio con el fin de mantenerla bajo control serbio".
El ex presidente yugoslavo es considerado responsable del "desplazamiento forzoso de 800.000 civiles albaneses de Kosovo, y de la muerte de al menos 900, entre ellos mujeres y niños".