WASHINGTON.- El Presidente egipcio, Hosni Mubarak, defenderá la necesidad de proclamar un Estado palestino antes de entrar en negociaciones sobre las fronteras en Oriente Medio durante la visita que iniciará mañana, miércoles, a EE.UU., la tercera en dos semanas.
"Estamos hartos de declaraciones de principios (...). Vamos a discutir cómo podemos abrir una brecha" en el proceso, afirmó Mubarak en la víspera de su viaje, en una entrevista concedida en El Cairo al periódico "The New York Times" y publicada hoy.
Mubarak se reunirá el jueves con miembros de la administración estadounidense, y se trasladará después a Camp David, residencia presidencial de descanso, donde se entrevistará el viernes y el sábado con el presidente, George W. Bush.
Será el inicio de una nueva ronda de contactos diplomáticos sobre Oriente Medio que tendrá como escenario Washington, ciudad que visitará también el lunes el primer ministro israelí, Ariel Sharon.
La propuesta del mandatario egipcio, según fuentes diplomáticas, busca ofrecer esperanza a los palestinos, reducir la tensión en la zona y poner los cimientos de un consenso internacional sobre la necesaria vinculación entre un Estado palestino y la paz.
En sus declaraciones a "The New York Times", Mubarak consideró que "declarar un estado palestino, aunque sea en el plano teórico, y luego sentarse a negociar sobre cuáles serían las fronteras y sobre el estatus de Jerusalén, es una fórmula que creo que funcionaría".
Sobre la propuesta de Mubarak, Bush afirmó este martes que lo escuchará personalmente, antes de entrar en valoraciones sobre declaraciones.
El portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, añadió que una vez Bush escuche a Mubarak y a otros líderes de Oriente Medio "se determinará si hay medidas adicionales que el Gobierno de EE.UU. puede o debe tomar".
La administración de EE.UU. espera también conocer las gestiones que realizan estos días en la región el director de la CIA, George Tenet, sobre cuestiones de seguridad, y el secretario de Estado adjunto, William Burns, sobre asuntos políticos.
Mubarak, como los líderes de otros países árabes, quiere que la Casa Blanca se involucre más activamente para buscar una solución al conflicto y establezca un calendario de negociaciones.
Además, considera imprescindible que Washington medie entre israelíes y palestinos, teniendo en cuenta que Sharón y el líder de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, no podrán resolver el problema sin la ayuda de terceros.
"Dejar el problema sobre el Medio Oriente en manos de Arafat y Sharón nada más, es una garantía de que no se llegará a ninguna parte", manifestó el Presidente egipcio.