BOGOTÁ.- El Presidente colombiano, Alvaro Uribe, afirmó hoy en una visita inesperada a la localidad de Saravena, objetivo hace dos días de un ataque de la guerrilla de las FARC, que el conflicto armado "hay que resolverlo rápido".
"Esta es una tragedia, (y) no hay pueblo en el mundo que la soporte", sostuvo Uribe ante un consejo extraordinario de seguridad que encabezó en esa población del nordeste del país.
El gobernante dijo que las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) han pretendido someter a los gobiernos locales, mientras que los paramilitares de ultraderecha "se ensañaron con los pueblos, para derramar su sangre".
"Bajo este régimen de terror no hay militares ni policías que sirvan", advirtió Uribe, quien renovó el llamado a los colombianos para que se unan a las redes de cooperación ciudadana con la fuerza pública, parte de un polémico proyecto contra los grupos implicados en el conflicto que ha definido como de "seguridad democrática".
El Presidente viajó a Saravena junto a la ministra de Defensa, Martha Lucía Ramírez; el fiscal general, Luis Camilo Osorio, y los altos mandos de las Fuerzas Militares y de Policía, para dirigir un consejo extraordinario de seguridad.
La reunión fue convocada a raíz del atentado terrorista que el viernes sacudió a esa localidad, a unos 700 kilómetros al nordeste de Bogotá y en el departamento petrolero del Arauca, limítrofe con Venezuela.
En el atentado de las FARC murieron cinco civiles y 36 personas más resultaron heridas, varias de ellas de las fuerzas de seguridad.
Los rebeldes lanzaron cinco bombas preparadas con cilindros de gas doméstico contra la estación policial del pueblo, pero los artefactos se desviaron del objetivo e impactaron en casas de vecinos.
Las autoridades advirtieron que Saravena ha sido afectada por 57 acciones guerrilleras en lo que va de año, período en el que la misma guerrilla ha realizado en el país un total de 95 ataques contra la población civil.
Uribe pidió a los lugareños que "rompan los vínculos con la guerrilla y los paramilitares (de ultraderecha)".
"Vengan todos a apoyar al Ejército y la Policía", agregó el gobernante, y puntualizó que "éste es el principio para desterrar el terrorismo de (la región de) Arauca".
