JERUSALEN.- Las relaciones entre Israel y las organizaciones internacionales se volvían tensas este martes tras varios graves incidentes, entre ellos la muerte de un empleado británico de la ONU y disparos, que el ejército israelí negó haber efectuado, contra un autobús de Naciones Unidas que transportaba estudiantes palestinos. }
"El ambiente se degrada regularmente, pero nunca habíamos alcanzado este nivel. Estamos muy preocupados", afirmó este martes Karen Abu Zayd, subdirectora de la agencia de la ONU para la ayuda a los refugiados palestinos (UNRWA).
Abu Zayd reaccionaba de este modo a un último incidente denunciado por la UNRWA, ocurrido el lunes por la noche en el sur de la Franja de Gaza. Uno de sus autobuses, que llevaba a estudiantes palestinos a casa, fue alcanzado por disparos israelíes en un retén militar cerca de Jan Yunés. Según la ONU, un joven de 19 años resultó levemente herido.
El ejército israelí desmintió haber efectuado disparos contra el autobús, limitándose a reconocer que soldados habían realizado disparos de intimidación con el objetivo de forzar a algunos vehículos que se dirigían hacia ellos a dar media vuelta.
Este nuevo incidente se produjo cuatro días después de la muerte de dos empleados palestinos de la UNRWA durante un ataque militar israelí en el campo de refugiados de Bureij, en el centro de la Franja de Gaza, que había costado la vida a diez personas.
Dos semanas antes, el británico Iain Hook, jefe del proyecto de la UNRWA para la rehabilitación del campo de refugiados de Jenín (norte de Cisjordania), había muerto por disparos de un soldado israelí durante una incursión del ejército.
Las circunstancias de su muerte son objeto de una doble investigación del ejército y de la ONU.
Sin esperar la publicación de estas investigaciones, Abu Zayd se pregunta abiertamente sobre un eventual "cambio" en las consignas dadas por el ejército israelí a sus soldados.
"En el pasado, los soldados prestaban atención a los vehículos y a los empleados de la ONU. Temo que haya una ’luz verde’ en estos últimos días", dijo.
Desde inicios de 2002, la UNRWA, la agencia más importante de la ONU en los territorios palestinos con 11.000 empleados, deplora seis víctimas fatales en sus filas, todas muertas por el ejército israelí.
Al ser consultado por la AFP, un portavoz del ministerio israelí de Relaciones Exteriores, Gilad Millo, se negó a mencionar "excesos" del ejército mientras las investigaciones en curso no hayan concluido.
"El ejército opera contra el terrorismo, no contra la ONU", afirmó Millo. "Nuestros soldados no apuntan adrede contra los empleados de la ONU. No tienen ni el deseo ni la necesidad", concluyó.