BUENOS AIRES.- El Presidente argentino, Eduardo Duhalde, volvió hoy a manifestar su optimismo sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) al considerar que en una escala de uno a diez, están en "ocho" las chances de conseguir esa meta.
En declaraciones radiales, el Presidente se refirió a la misión del organismo que visita actualmente la Argentina y señaló que lo único que espera es que con esa delegación se "trabaje sobre algunos detalles técnicos" porque "la misión no vino con facultades de avanzar en la negociación".
Por su parte, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, afirmó esta mañana que el acuerdo con el FMI constituye "la única solución" al no pago de los vencimientos en los que está incurriendo país con los organismos multilaterales de crédito.
Pese a la importancia que el gobierno le atribuye al acuerdo, Atanasof destacó que "no depende solamente" del Ejecutivo argentino, "porque para bailar un tango hacen falta dos", pero insistió en expresar la expectativa de que "a la brevedad el FMI decida firmar un acuerdo beneficioso y que sea cumplible".
El Estado argentino volvió a dejar impagos compromisos con organismos multilaterales y tenedores de bonos que vencían ayer por 1.438 millones de dólares.
Según escribe hoy el diario "Clarín", el lunes se debían abonar 690 millones al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), aunque existe la posibilidad de prorrogar ese vencimiento por 30 días.
En cambio, sí vencieron definitivamente 250 millones de dólares con el Banco Mundial (BM) que Argentina estaba obligada a pagar para mantener la garantía de un bono colocado entre inversores privados.
Por último, tampoco se cumplió con un pago de intereses por 498 millones de dólares, correspondientes a una serie de bonos colocados en Japón, en poder de 30.000 pequeños inversores nipones.
Tanto el BID como el BM rechazaron en las últimas horas la iniciativa de un sector del gobierno argentino de lograr acuerdos por separado con esas entidades mientras continúan las demoradas negociaciones con el FMI, que ya llevan 11 meses y ayer entraron en una nueva etapa con el inicio de una misión a Buenos Aires.
El 15 de enero, el gobierno de Buenos Aires debería honrar ante el BID un vencimiento de deuda de más de 800 millones de dólares.
Además, el gobierno argentino incumplió este sábado por tercera vez el pago de un vencimiento de deuda por 729 millones de dólares al Banco Mundial, que debía haber saldado el 14 de octubre o el 14 de noviembre, y profundizó la situación de cesación de pagos con el organismo.
Las entidades multilaterales de crédito habían quedado exceptuadas del "default" declarado en diciembre de 2001 de la porción privada de la deuda externa argentina, pero ante la falta de asistencia financiera externa Buenos Aires decidió no destinar sus menguadas reservas de divisas para cumplir con los compromisos con estas instituciones.
Los vencimientos de la deuda pública con los tres organismos multilaterales hasta junio de 2003 ascienden a unos 8.204 millones de dólares, algo menos de los cerca de 10.000 millones de dólares de los que dispone el gobierno en sus reservas del Tesoro.
Duhalde aseguró ayer que su gobierno no está conforme con el incumplimiento de sus obligaciones con los organismos internacionales. "No nos gusta nada, porque es la prueba del fracaso de un país", señaló.
En tanto, el Palacio de Hacienda estimó que no se lograrán grandes avances durante la estadía de 72 horas de una misión del FMI en Buenos Aires, ya que los técnicos del organismo probablemente se limitarán a actualizar su auditoría de las cuentas públicas locales y de los planes monetario y económico, además de controlar el cumplimiento de otros requisitos.
El FMI suspendió hace un año la asistencia financiera a Argentina por el incumplimiento de las metas acordadas con el entonces presidente Fernando de la Rúa.