BEIJING.- La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, manifestó hoy que ha instado a los líderes chinos a aumentar su presión sobre Corea del Norte para que vuelva a participar en las conversaciones a seis bandas sobre su controvertido programa nuclear.
"China, en particular, tiene un papel importante que desempeñar para convencer a Corea del Norte de que el mejor camino para mejorar sus relaciones con el resto del mundo es regresar a las conversaciones", dijo Rice a la prensa tras reunirse con el ministro chino del Exterior, Li Zhaoxing.
China debe "dejar muy claro a Corea del Norte que ha llegado el momento para que regrese a las conversaciones con un espíritu constructivo", manifestó la secretaria de Estado. "Que reanudemos las conversaciones o no depende de Corea del Norte".
Rice, que realiza su primera gira por Asia desde que asumió la jefatura de la Secretaría de Estado, indicó que Estados Unidos sigue comprometido a resolver mediante el diálogo la disputa sobre el programa nuclear norcoreano. Pero, añadió, podría considerar otras opciones si el diálogo resulta imposible.
Beijing ha albergado tres rondas de conversaciones entre Estados Unidos, Corea del Norte, China, Corea del Sur, Japón y Rusia. Una cuarta ronda, prevista para septiembre pasado, no llegó a celebrarse porque Pyongyang rechazó acudir.
El domingo, Rice también discutió con el presidente de China, Hu Jintao, y con el primer ministro, Wen Jiabao, el tema de Corea del Norte, tras haber mantenido anteriormente conversaciones con autoridades de Corea del Sur y Japón.
Hu y Wen instaron a Rice a "comprender, respetar y apoyar" la controvertida "ley antisecesión" aprobada por China la semana pasada para prevenir que Taiwan declare formalmente la independencia.
Estados Unidos había criticado a China por aprobar esa norma, que incluye un párrafo que especifica unas condiciones amplias bajo las cuales China podría actuar militarmente contra Taiwan.
Rice dijo hoy que espera que China "dé pasos para reducir la tensión con Taiwan", tras la introducción de esa ley. Reiteró asimismo la oposición de Estados Unidos a que la Unión Europea levante el embargo de armas impuesto tras las medidas militares del gobierno chino contra los participantes en las manifestaciones prodemocráticas de 1989.
"Introducir un factor como el levantamiento del embargo no conduce a la paz en la región", dijo Rice. "Podría servir para alterar la balanza en un área en el que Estados Unidos tiene intereses de seguridad".
Al comienzo de su gira asiática, Rice había urgido a la UE a mantener su embargo de armas contra China, diciendo que Washington está preocupado por la posibilidad de que China adquiera mayor tecnología militar avanzada de Europa.
Rice dijo que ha planteado a los líderes chinos numerosas cuestiones relativas a los derechos humanos y que los ha urgido a permitir reformas democráticas en línea con el rápido desarrollo económico de China.
