CARACAS.- El Gobierno de Venezuela pidió hoy a Estados Unidos la extradición del cubano anticastrista nacionalizado venezolano Luis Posada Carriles, informaron medios locales.
La petición de su "detención preventiva con fines de extradición" fue formalizada hoy por funcionarios de la Embajada de Venezuela en Washington ante el Departamento de Estado de EEUU, aseguró la emisora privada de televisión venezolana Globovisión.
Ésta se basa en el Tratado de Extradición bilateral en vigor desde el 19 de enero de 1922, y recuerda que el arresto preventivo de Posada Carriles fue requerido al Ministerio de Exteriores por un juzgado penal de Caracas.
Las fuentes citadas por la emisora recordaron que el 2 de noviembre de 1976 un tribunal de venezolano "determinó la culpabilidad y la consecuente responsabilidad criminal de Posada y Orlando Bosch como coautores" de un atentado con bomba contra un avión de la Aerolínea Cubana de Aviación en el que murieron 73 personas.
Añade que "por este hecho, Luis Posada recibió una sentencia como coautor en los delitos de homicidio agravado y manufactura de armas de guerra".
En 2000, Posada Carriles fue detenido en Panamá tras una denuncia del Gobierno cubano de planear un atentado contra el Presidente Fidel Castro, que asistía a una cumbre iberoamericana en ese país.
No obstante, las autoridades panameñas desestimaron la acusación y procesaron a Posada y a otros tres cubanos exiliados bajo cargos de posesión de armas y uso de documentos falsos. A finales del año pasado, los cuatro fueron liberados tras ser indultados por la entonces Presidenta panameña, Mireya Moscoso.
Oficialmente, el Gobierno de Washington ha dicho que desconoce si Posada está en EE.UU., según indicó el miércoles Roger Noriega, subsecretario de Estado para Asuntos Latinoamericanos.
Además de las acciones de los poderes Ejecutivo y Judicial, el Parlamento venezolano pidió ayuda a la ONU, a la OEA y a la UE para que EE.UU. extradite a Posada, al que calificó de "uno de los más temibles terroristas que conoce la historia de Latinoamérica".
Las autoridades venezolanas sostienen que EE.UU. demostrará con este caso si es o no coherente en su lucha antiterrorista mundial.
"No se puede mantener una política declarativa, retórica, de condena al terrorismo y, en la práctica, cuando se plantean las situaciones concretas, entonces no se atiendan los requerimientos de la lucha antiterrorista", dijo el vicepresidente venezolano, José Vicente Rangel.
