KABUL.- Bajo la vigilancia de unos 100.000 soldados y policías, los afganos votan hoy en las primeras elecciones legislativas democráticas de su historia, precedidas desde primeras horas por nuevos actos de violencia.
En Kabul, donde la seguridad se ha reforzado los últimos días, un cohete estalló a primera hora de la mañana en un almacén de la ONU hiriendo de levedad a un empleado afgano, mientras en la provincia de Khost (este de Afganistán) un ataque de supuestos talibán a un puesto policial causó la muerte de tres rebeldes y dos policías.
Este sábado, un soldado francés de las fuerzas especiales murió y otro resultó gravemente herido al estallar una mina al paso de su vehículo en Kandahar (sur de Afganistán) mientras en Khost un militar estadounidense fue herido en combate.
Casi 12,5 millones de afganos están convocados a votar en 6.300 centros electorales en todo el país -algunos remotos y de difícil acceso-, que abrieron sus puertas a las seis de la mañana hora local y tienen previsto cerrar a las 16:00 horas (07:30 hora de Chile).
La seguridad ha sido reforzada, especialmente en el conflictivo sur y este del país, con el despliegue de 80.000 policías y soldados afganos, apoyados por cerca de 30.000 militares extranjeros, ante el temor de ataques de los talibán.
Los rebeldes ultraintegristas han declarado una ofensiva contra las elecciones legislativas en Afganistán y durante la campaña han asesinado a siete candidatos a los comicios legislativos y atacado a varias mujeres candidatas.
La Comisión Electoral, integrada por el Gobierno afgano y la ONU, espera que haya actos de violencia durante la jornada de hoy, aunque no que sean suficientes para paralizar el proceso, y de momento la jornada está transcurriendo tranquila.
Estas son las primeras elecciones legislativas en Afganistán en los últimos 30 años, pero la primera vez en la historia que se celebran con el sistema de sufragio universal.
