WASHINGTON.- Panamá informó el viernes por la noche que no pudo llegar a un acuerdo en sus negociaciones de libre comercio con Estados Unidos y fijará un nuevo encuentro en fecha aún no determinada.
El punto de controversia fue un cambio exigido por Estados Unidos en las medidas sanitarias para el ingreso de productos estadounidenses al mercado panameño, y viceversa.
El tema había sido ya negociado, pero Estados Unidos pidió un cambio en septiembre. El gobierno del presidente Martín Torrijos se estuvo resistiendo a reabrir el caso, pero aparentemente sin éxito.
Las partes iniciaron la actual ronda —novena del proceso que empezó hace dos años— con la intención de concluir las negociaciones el jueves, pero la ampliaron por un día más a la espera de allanar desavenencias.
Sin embargo, el equipo negociador panameño —encabezado por el ministro de Industria y Comercio Alejandro Ferrer— informó que pese a los "importantes avances en la negociación" de ocho capítulos agroindustriales, Panamá decidió "no llegar a un acuerdo final".
"Estados Unidos entendió perfectamente la posición del equipo negociador de Panamá en cuanto al tema fito y zoosanitario", dijo.
Indicó que Panamá fijará la próxima fecha para lo que sería la décima ronda.
El actual encuentro en Washington se realizó luego de una paralización de 11 meses, y el próximo se fijará luego que Panamá concluya un "estudio científico" sobre las consecuencias que le significaría al país cambiar sus patrones fitosanitarios, dijo Ferrer.
En un comunicado, los negociadores panameños afirman que se han "producido importantes avances en la negociación de acceso a mercados de rubros sensitivos agrícolas y el Canal de Panamá".
"Tras una intensa labor de intercambio de información para conocer las preocupaciones americanas en materia sanitaria y fitosanitaria y tras explicar los sistemas panameños, se hizo evidente que existían diferencias fundamentales, ante las que el equipo panameño tomó la determinación de que un tema eminentemente científico no podía ser decidido sin contar con el previo y debido análisis científico", agregaron.
En la controversia fitosanitaria, la situación planteada en la mesa de negociaciones era que Estados Unidos quiere seguir procedimientos que sólo provengan de sus propias agencias federales tanto para comprar como para vender en Panamá.
En la séptima ronda en el 2004 había aceptado que, cuando se trate de vender en Panamá, sea este país el que fije los patrones a través de un tedioso procedimiento que pasa por la Organización Mundial de Comercio. Pero serían las agencias federales las que certifiquen el ingreso de productos panameños a Estados Unidos.