LONGYEARBYEN.- Este lunes comenzaron los trabajos en el Ártico para construir un banco mundial de semillas con el que los científicos esperan prevenir la extinción de especies únicas como las que se han perdido en las guerras en Afganistán e Irak.
La cámara subterránea en una isla remota acogerá unos 1.500 millones de semillas y tres millones de variedades en un túnel reforzado con hormigón a 700 metros de profundidad en una montaña, guardado por dos puertas de acero y controlado remotamente desde Suecia.
"Este banco de semillas es de importancia global", dijo el Primer Ministro noruego Jens Stoltenberg en la ceremonia que marca el inicio de la construcción en una montaña azotada por los vientos en el archipiélago Svalbard.
"Esta es nuestra última red de salvación. Si las semillas se almacenan en un banco genético comercial se destruyen, y esto ha pasado aparentemente unas 40 veces hasta la fecha, los contenidos de este banco de genes harán posible sustituir las semillas que se han perdido", dijo.
Situado a unos 1.000 kilómetros del Polo Norte, Svalbard es un archipiélago desolado y desarbolado donde la agricultura es imposible. Noruega controla las islas y ha aceptado pagar los 3.000 millones de dólares que cuesta la construcción.
Se trata de una iniciativa conjunta del Instituto Internacional de Recursos Genéticos de Plantas y de la Organización para la Alimentación y la Agricultura de la ONU para respaldar la diversidad de las cosechas y ayudar a garantizar alimento a la población mundial.
La temperatura de la cámara se mantendrá a menos 18 grados, la más favorable para la conservación de las semillas, dijo Fowler, y si la energía eléctrica falla el permafrost natural mantendrá la temperatura por debajo de la congelación.