FREETOWN.- El ex Presidente de Liberia Charles Taylor fue trasladado hoy desde Sierra Leona a Holanda, donde afrontará un juicio por crímenes de guerra, dijo el vicepresidente del país africano, Solomon Berewa.
Taylor enfrenta once acusaciones de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad por apoyar a los rebeldes del Frente Revolucionario Unido de Sierra Leona, que envió a niños soldados drogados al campo de batalla, y mataron, mutilaron o violaron a civiles durante la guerra civil del país del oeste de África en la década de 1990.
"Estamos satisfechos de que sea llevado a juicio en una zona segura de Holanda mientras nosotros en Sierra Leona y los países del Mano River Union continuamos consolidando la paz", dijo Berewa.
El frente Mano River Union agrupa a Sierra Leona, Liberia y Guinea, que se vieron inmersos en una espiral de violencia en los catorce años posteriores a que Taylor iniciara la guerra civil de Liberia en 1989.
Taylor fue trasladado este martes a primera hora en helicóptero desde el complejo del Tribunal Especial de Sierra Leona, que le ha acusado de crímenes de guerra.
"Los habitantes de Sierra Leona lo único que querían era ver a Taylor acusado y arrestado, algo que ya se ha hecho", añadió Berewa.
Los años de guerra civil paralela en Liberia llegaron al final después de que Taylor accediera a irse al exilio en Nigeria en el 2003.
Capturado cuando intentaba abandonar Nigeria a principios de este año, mientras crecía la presión para que fuera juzgado, Taylor fue trasladado al Tribunal Especial y acusado de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Pero la nueva Presidenta de Liberia, Ellen Johnson-Sirleaf, expresó su preocupación respecto a que la presencia de Taylor en la región podía alentar la inestabilidad en Liberia, donde el detenido cuenta con amplios apoyos entre algunas secciones de la población.
Holanda accedió a albergar entonces el juicio en las instalaciones de La Haya con la condición de que un tercer país accediera por adelantado a encarcelar a Taylor si fuera condenado a prisión.
Gran Bretaña prometió la semana pasada mantener a Taylor encarcelado y redactó una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU autorizando la transferencia de Taylor a Holanda para someterlo a juicio.