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EE.UU.: Ley de inmigración separa a hermanas mexicanas

El motivo aducido por las autoridades de inmigración para el rechazo es que Sarah Huacuja nunca fue legalmente adoptada por los abuelos que las recogieron luego que su madre falleció en México en 1988.

10 de Julio de 2006 | 20:53 | AP
TUCSON.- Dos hermanas llegaron a Estados Unidos desde México en las mismas circunstancias y crecieron en el mismo hogar, pero años más tarde el gobierno estadounidense decidió que sólo una puede permanecer legalmente en el país.

Sarah Huacuja, de 18 años, supo recientemente que no llenaba los requisitos para residir legalmente en Estados Unidos, aunque su hermana, Andrehyva Huacuja, de 23, obtuvo los documentos de la residencia permanente hace tres años.

El motivo aducido por las autoridades de inmigración para el rechazo es que Sarah nunca fue legalmente adoptada por los abuelos que las recogieron luego que su madre falleció en México en 1988. Pero tampoco lo fue Andrehyva.

La decisión llegó luego de casi cuatro años de espera y del gasto de mucho dinero.

"Confiamos en que el servicio de inmigración nos guiara por el sistema, y nos abandonó", dijo la abuela de las jóvenes, Aurora Coalla, quien junto con su esposo, José, consiguió la ciudadanía estadounidense hace años.

Bill Johnston, encargado de la oficina del Servicio de Inmigración y Ciudadanía en Tucson, reconoció que por un error su agencia otorgó la residencia legal permanente a la hermana mayor, aunque aclaró que desconoce por ahora si la medida sería rescindida.

Johnston señaló que la hermana menor podría optar por la condición legal si demuestra que sus abuelos la adoptaron antes de que cumpliera 16 años, pero reconoció que ese requisito no fue solicitado a la hermana mayor.

Sarah, que en mayo se graduó con honores en la secundaria, dijo que la decisión cancela sus planes de seguir estudiando en Estados Unidos.

Los abuelos acudieron a la abogada especialista en inmigración Gloria Goldman en busca de ayuda.

"Qué confusión", dijo Goldman. "Esto demuestra en realidad cuán complicadas son las leyes de inmigración aquí —en algunas ocasiones hasta la gente que las administra se confunde".

Sin embargo, la abogada confió en que las autoridades de inmigración mantengan la residencia otorgada a la hermana mayor y permitan a Sarah permanecer en el país con "estatus diferido".

Las hermanas tenían visas estadounidenses de viaje cuando sus abuelos las llevaron a Tucson en 1997 y los documentos son todavía válidos.