MADRID.- La matanza de hoy en Qana, con al menos 55 fallecidos, es la segunda en esta localidad sureña del Líbano desde que hace diez años un centenar de civiles murieran allí a causa de otro bombardeo durante la operación militar israelí "Uvas de la Ira".
El 18 de abril de 1996 murieron 102 civiles libaneses y tres "cascos azules" después de que misiles israelíes impactaran contra el cuartel de la Fuerza Interina de las Naciones Unidas en el Líbano (FINUL) en Qana, donde se habían refugiado cientos de personas huyendo de los ataques israelíes a sus aldeas.
"Uvas de la Ira", lanzada el 11 de abril de ese año, alcanzó también a las ciudades de Beirut, Sidón y Tiro y llegó hasta la frontera con Siria, con un resultado de doscientos muertos, cuatrocientos heridos, el éxodo de 400.000 habitantes el sur del Líbano y daños a ese país por más de mil millones de dólares.
La ofensiva duró dieciséis días, hasta la entrada en vigor de una tregua el 27 de abril de 1996, y se produjo en represalia por el lanzamiento de cohetes contra poblaciones del norte de Israel por parte de las milicias del grupo chiita libanés, Hezbollá.
Diez años después, otra acción de Hezbollá, en la que murieron siete soldados israelíes y dos fueron secuestrados el 12 de julio, desencadenó la actual ofensiva militar de Israel en el Líbano, con más de cuatrocientos fallecidos hasta hoy, a los que hay que sumar los al menos 55 muertos en el edificio bombardeado en Qaná.
Otro punto de similitud entre ambas ofensivas es la presencia en el gobierno israelí de Simon Peres, premio Nobel de la Paz 1994, que durante la operación "Uvas de la Ira" ejercía como primer ministro y titular de Defensa y ahora es viceprimer ministro.
La ofensiva de 1996 fue la de mayor envergadura desde que, bajo el Gobierno de Menahem Beguin, Israel emprendió en 1982 la operación "Paz en Galilea", en la que murieron 20.000 personas, incluidos 650 soldados israelíes.