GINEBRA.- La histórica política de neutralidad de Suiza permite que la mayoría de sus ciudadanos no perciba el terrorismo internacional como una amenaza y que el 90 por ciento se sienta desde hace años "muy seguro" o "bastante seguro" en su país, según las conclusiones de un sondeo difundido hoy en ese país.
En su encuesta anual sobre la seguridad nacional, la Academia Militar helvética y el Centro de Investigación sobre Política de Seguridad de la Escuela Poderal de Zúrich (EPFZ) muestra que el 80 por ciento de los encuestados ve la neutralidad como un principio indisociable a su concepto de Estado.
La EPFZ también observó que los suizos valoran la neutralidad política y la existencia de un ejército propio como "instrumentos muy útiles" en materia de seguridad ciudadana.
Por ello, la propuesta de la ministra suiza de Asuntos Exteriores, Micheline Calmy-Rey, para que el país alpino se postule a un asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU y envíe tropas al Líbano fue rechazada por una gran parte de la población.
El "activismo" que pretende instaurar la ministra socialista ha motivado, por ejemplo, que la Unión Democrática de Centro (partido de extrema derecha que cuenta con dos ministros en el Gobierno colegiado helvético) prepare una iniciativa popular para inscribir el respeto a la neutralidad en la Constitución.
La escasa preocupación por el terrorismo internacional de los suizos no impide, sin embargo, que el 65 por ciento esté dispuesto a aceptar un recorte de su libertad individual si ello contribuye a combatirlo, lo que supone un incremento de 14 puntos con respecto a hace un año.
Además, el 64 por ciento está de acuerdo con la existencia de cámaras de vigilancia en lugares públicos, 4 puntos más que en 2005.
