ROMA.- Los pasajeros del avión turco secuestrado hoy, que se encuentra en el aeropuerto italiano de Brindisi, comenzaron a descender de la aeronave, reportaron medios locales.
Aparentemente la acción terminó sin que se registraran heridos. Los dos secuestradores turcos se habrían entregado a las autoridades, indicó la televisión italiana.
El avión turco de pasajeros, que había partido de Tirana rumbo a Estambul fue secuestrado hoy en el espacio aéreo griego y obligado a aterrizar en Brindisi, sudeste de Italia.
La condicidión que ponían los secuestradores para bajar del avión era entregar un mensaje al Papa Benedicto XVI, indicó la policía italiana. Según la televisión turca, en base a fuentes políticas, el avión fue secuestrado para protestar por la próxima visita del Pontífice a Turquía, prevista para fines de noviembre.
En el aparato viajaban 110 personas (106 de ellos pasajeros), dijo el ente nacional de la aviación civil italiana (ENAC).
El aeropuerto fue cerrado al tráfico y la policía rodeó la zona. El avión fue ubicado en la pista más cercana al mar y pertenece a la Turkysh Airlines.
El presidente de las líneas aéreas turcas, Candan Karlitekin, declaró a la NTV que en la acción no se reportaron heridos. "Los pasajeros y la tripulación no están bajo amenaza", dijo.
El avión había partido de Tirana, Albania, a las 16:20 italianas (10:20 en Chile) hacia Estambul, dijeron fuentes albanesas.
El jefe de la policía italiana, Gianni De Gennaro, abandonó una reunión para regresar al Ministerio del Interior y seguir directamente el caso. Tras el secuestro del avión, se puso en marcha en toda Italia el plan "Leonardo da Vinci" que se refiere a la seguridad nacional en caso de secuestros para finalidad de terrorismo.
Al darse la alarma, dos aviones caza F16 italianos interceptaron la nave comercial y la obligaron a descender.
