CIUDAD DEL VATICANO- El papa Benedicto XVI dijo hoy en la homilía de la Misa de Gallo que la Navidad llama a que "sea respetada la dignidad de los niños", de todos ellos, los que sufren, los que son víctimas de abusos y de las guerras, y también los que no se les permite nacer.
En la misa celebrada en la Basílica de San Pedro, el papa invocó así el espíritu del Niño de Belén."Dios se hizo pequeño a fin de que nosotros pudiésemos comprenderlo, acogerlo, amarlo", dijo el Pontífice, hablando del nacimiento de Jesús.
Es así que, prosiguió, "Dios enseña a amar a los pequeños, enseña a amar a los débiles, enseña de este modo el respeto frente a los niños".El papa celebró la misa ante la Basílica colmada, mientras miles de fieles permanecía en la Plaza San Pedro.
En su invocación por el espíritu de la Navidad, Benedicto XVI mencionó a los niños usados como soldados e introducidos en el mundo de la violencia, los niños que deben mendigar, los que sufren miseria y hambre y "los niños que no experimentan ningún amor".
En todos ellos, insistió, "está el Niño de Belén". El pontífice, ataviado con ornamentos dorados, recorrió en su ingreso la nave central del templo y se detuvo brevemente a saludar a algunos fieles.
Como es tradicional, participaron de la misa miembros del cuerpo diplomático y autoridades civiles y religiosas. Este año, entre las varias lenguas usadas en la celebración, la liturgia incluyó una plegaria en árabe.