MUNICH- La Unión Europea debería reconocer claramente sus raíces cristianas, demandó la canciller de Alemania y actual presidenta del Consejo de la Unión Europea, Angela Merkel, en declaraciones que difunde hoy el semanario "Focus".
Merkel criticó nuevamente el hecho de que el preámbulo de la fracasada Constitución Europea no haga referencia alguna a Dios.
"Es dudoso que pueda sobrevivir el sello del cristianismo en la política diaria sin un reconocimiento claro de la responsabilidad ante Dios y los hombres. Europa debe ocuparse de esta cuestión", opinó la mandataria, hija de un pastor protestante.
Según Merkel, reconocer el cristianismo no implica que nadie quede excluido. "Por puro temor (a marginar a fieles de otros credos) prescindimos de propagar nuestras propias convicciones", se lamentó.
La diplomática agregó que "Europa no es un club de cristianos, sino más bien un club de valores", por lo cuales los europeos "debieran estar dispuestos a luchar".