WASHINGTON/JERUSALÉN.- Un alto funcionario norteamericano afirmó hoy la intención de Estados Unidos de boicotear al nuevo Gobierno palestino mientras no cumpla las condiciones impuestas por el Cuarteto para Cercano Oriente.
Hasta que el nuevo Gobierno de unidad nacional cumpla los principios del Cuarteto, Estados Unidos "no quiere tener nada que ver" con el ejecutivo palestino, dijo el asesor de Seguridad norteamericano, Stephen Hadley, en entrevista con la cadena CNN.
Sin embargo, poco antes una portavoz del consulado estadounidense en Jerusalén había indicado que su país mantendrá contactos con algunos miembros del nuevo gabinete palestino, siempre y cuando no sean miembros de Hamás.
Según explicó la portavoz, Estados Unidos sigue considerando a Hamas una organización terrorista y no hay planes de cambiar esta política.
"Pero no vamos a interrumpir los contactos con algunas personas determinadas sólo porque hayan recibido un puesto ministerial", agregó.
La portavoz no quiso revelar ningún nombre en concreto, sino que indicó que se estudiará cada caso.
Hadley dijo a CNN que Washington seguirá las palabras y hechos del nuevo gabinete.
Estados Unidos espera que se den pasos en la dirección correcta y se tomen medidas contra la violencia, continuó el asesor, quien sin embargo subrayó que hasta el momento no ha habido indicios de ello.
Israel ha instado a la comunidad internacional a mantener un boicot total al gobierno de unidad nacional del primer ministro Ismail Haniya, de Hamas, por considerar que no ha cumplido los requisitos internacionales exigidos.
El gabinete, que asumió el sábado, está conformado también por miembros de la facción rival Al Fatah y ministros independientes, conforme a un acuerdo alcanzado a comienzos de febrero en La Meca.
El Estado judío ya ha anunciado que sólo mantendrá contactos con el Presidente palestino y líder de Al Fatah, Mahmud Abbas.
En tanto el sábado, Estados Unidos se manifestó "decepcionado" por el nuevo Gobierno palestino nada más anunciarse su conformación y sostuvo que es "inconsistente" con los principios de un plan internacional de paz para la región.