CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Benedicto XVI denunció hoy las dificultades de los jóvenes que comienzan en el mundo del trabajo, y que no les permiten crearse un proyecto de futuro, o comprometerse a formar un matrimonio o una familia.
Benedicto XVI mostró esta preocupación en un mensaje enviado a los participantes del IX Fórum Internacional de los Jóvenes sobre el tema "Testigos de Cristo en el mundo del trabajo".
El papa explicó como en los últimos años, a pesar de los grandes progresos que se han realizado en el mundo del trabajo, también éstos han creado "formas preocupantes de marginación y de explotación, que han aumentado las situaciones de malestar personal".
El Pontífice destacó que "han aumentado las dificultades para conseguir una ocupación que responda a las aptitudes y a los estudios realizados", y que los jóvenes se enfrentan a "la incertidumbre sobre si podrán mantener el empleo".
"Esto genera un inquietante sentimiento de seguridad, con repercusiones incluso sobre el poder imaginar la puesta en marcha un proyecto de futuro o comprometerse, concretamente, en un matrimonio o en la formación de una familia,” señaló el Papa.
En su mensaje, el Pontífice también instó a "valorar la dimensión humana del trabajo y tutelar la dignidad de la persona" en el actual contexto "de liberalismo económico, condicionado por las presiones del marcado, de la competitividad y la competencia".
Asimismo, recordó que en su mensaje para la Jornada Mundial de la Juventud había dicho a los jóvenes que "no cuenta sólo ser sólo competitivos" y "productivos" sino también "testigos de la caridad".