El jefe de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid.
EFE
WASHINGTON.- El jefe de la mayoría demócrata en el Senado de Estados Unidos, Harry Reid, afirmó hoy que el presidente George W. Bush "no ve la realidad" en Irak, al tiempo que los demócratas discuten una legislación que podría restringir los fondos para la guerra.
Reid se reunirá hoy con el jefe de las fuerzas militares estadounidenses en Irak, general del ejército, David Petraeus, y su oficina divulgó algunas porciones del discurso que el senador de Nevada pronunciará tras ese encuentro.
El presidente Bush, que en enero ordenó el envío a Irak de cinco divisiones adicionales, ha reiterado que hay signos de progreso en materia de seguridad en Bagdad, y ha pedido que el Congreso apruebe unos 100.000 millones de dólares para las campañas militares en ese país y en Afganistán.
"Yo creo que el Presidente no ve la realidad", sostuvo Reid, quien la semana pasada afirmó que la guerra "está perdida".
En su discurso de hoy, el senador sostiene que "la misión militar en Irak se completó hace mucho. El fracaso ha sido político. Ha sido un fracaso de política, un fracaso presidencial".
La Cámara de Representantes y el Senado han aprobado versiones diferentes de la ley de fondos para la guerra, y mientras la primera fija septiembre de 2008 como plazo para que salgan de ese país todas las tropas de combate estadounidenses, el segundo recomienda, pero no ordena, que salgan en marzo de 2008.
Bush ha dicho que vetará cualquier legislación que fije plazos para las operaciones militares.
Sin los fondos adicionales los mandos militares enfrentarán dificultades crecientes para mantener en Irak una fuerza de más de 150.000 soldados.
Negociadores demócratas del Senado y de la Cámara de Representantes se reunirán esta tarde para armonizar sus proyectos de ley, en un trámite que puede irritar a los legisladores y sus votantes más resueltos a ponerle fin a la guerra cuanto antes.
Para que la ley sea inmune al veto presidencial debe obtener dos tercios de los votos en el Congreso, y los demócratas no tienen esa mayoría.
Los republicanos han indicado que no aprobarán una legislación que contenga plazos para la retirada de tropas.
Pero si los dirigentes legislativos demócratas ofrecen un proyecto de ley sin esos plazos, pueden perder el voto de varios legisladores en sus propias filas.
En su discurso de hoy Reid incluye llamamientos a la paciencia para los votantes más opuestos a la guerra, que son los que dieron al Partido Demócrata la mayoría en ambas cámaras en noviembre pasado por primera vez en doce años: "Entiendo la inquietud que sienten algunos (...) Muchos de los que votaron por cambios en noviembre esperaban resultados espectaculares e inmediatos en enero" cuando comenzó el nuevo período legislativo.
"Pero, nos guste o no, George W. Bush sigue siendo el comandante en jefe, y ésta es su guerra", añadió Reid.
Para los republicanos el dilema es igualmente difícil: Bush ya no puede buscar la reelección en 2008, pero sus correligionarios con la mira en la próxima elección presidencial temen que el mantenimiento del mismo curso en Irak conduzca a una derrota en las votaciones.
"El presidente es el único que se mantiene en esa posición", sostuvo Reid. "Y Bush hace que la tarea sea aún más difícil porque exige una fidelidad absoluta de su partido", aseguró.