MOSCÚ.- Rusia efectuó hoy una exitosa prueba de un misil balístico intercontinental Bulavá-M, que fue lanzado desde un submarino nuclear de la Flota del Norte y dio en el blanco previsto en la costa del Pacífico, a varios miles de kilómetros de distancia.
"El submarino estratégico nuclear 'Dmitri Donskoi' efectuó un lanzamiento exitoso del novísimo misil balístico intercontinental Bulavá desde las aguas del mar Blanco hacia el polígono Kurá en la península de Kamchatka", informó un portavoz de la Armada rusa.
El submarino efectuó el lanzamiento en posición sumergida y "la cabeza del misil alcanzó el blanco programado en el plazo de tiempo previsto", según dijo a la agencia Interfax el portavoz, capitán de navío Igor Digalo.
Indicó que según los servicios técnicos de observación y control, "el vuelo transcurrió sin contratiempos, lo que demuestra que los esfuerzos de la industria de guerra y los militares que crearon esta última versión modernizada del misil, han sido todo un éxito".
Digalo añadió que una comisión naval supervisó en el submarino el lanzamiento y la actuación de la tripulación, y que el Comandante en Jefe de la Armada, almirante Vladimir Masorin, ya felicitó a todos los especialistas y militares que prepararon y realizaron la prueba.
Los misiles Bulavá (SS-NX-30, según clasificación de la OTAN), de tres etapas y combustible sólido, fueron diseñados como principal arma de las Fuerzas Estratégicas navales para las próximas décadas, pero sus tres anteriores pruebas habían fracasado.
La prueba del misil se produce a sólo tres días de una visita del Presidente ruso, Vladimir Putin, a EE.UU. para una cumbre con su colega George W. Bush, en medio de la polémica entre ambos países por los planes del Pentágono de instalar su escudo antimisiles cerca de las fronteras rusas en Europa del Este.
Los Bulavá, diseño y producto del Instituto de Tecnología Térmica de Moscú, tienen un alcance de 8.000 kilómetros y pueden portar hasta diez ojivas nucleares de guiado autónomo.
Estos misiles balísticos de emplazamiento marítimo deben ser el principal arma de los submarinos rusos de IV generación "Yuri Dolgoruki", "Alexandr Nevski" y "Vladimir Monomaj" (proyecto 955 "Borey"), dotados cada uno de doce Bulavá-M.
"Dmitri Donskoi", que es del proyecto 941U, fue remodelado en los astilleros "Sevmash" precisamente para las pruebas de los Bulavá, que lleva a cabo desde 2003 con un total de cinco realizados.
Los tres últimos lanzamientos, el 7 de septiembre, el 25 de octubre y el 24 de diciembre de 2006, fracasaron.