BOGOTÁ.- El portavoz de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), "Raúl Reyes", aseguró que el grupo rebelde mantiene inmodificable su propuesta de canje humanitario, en una entrevista divulgada hoy por la agencia de noticias Anncol, que difunde información insurgente.
El líder guerrillero reiteró además que la posibilidad de firmar un canje de rehenes por rebeldes presos en cárceles "puede ser la puerta de entrada para el reinicio de unos diálogos hacia la paz".
"Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) buscan la paz, pero no es la paz de la rendición, no es la paz para acomodarse los dirigentes de la organización y ciertos amigos, sino la paz para el pueblo", declaró "Reyes".
El grupo rebelde insiste en el despeje militar de los municipios de Pradera y Florida (suroeste) para llevar a cabo las negociaciones del intercambio de rehenes por rebeldes presos en cárceles, mientras que el gobierno colombiano se mantiene en que no aceptará dicha petición.
Por otro lado, "Reyes" cuestionó el desarme del principal grupo paramilitar colombiano, las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), y aseguró que nunca hubo un pacto de paz entre el gobierno colombiano y el grupo de extrema derecha porque "no se puede hacer un proceso de conciliación entre quienes no ha habido guerra".
"Los paramilitares son un apéndice, una extensión del Estado. Ellos han estado luchando por defender el mismo Estado, ellos nunca se alzaron en armas contra el Estado por un nuevo régimen, por un nuevo sistema", expresó.
El vocero rebelde reconoció además que la organización guerrillera recluta menores de edad desde los 15 años e indicó que el Plan Colombia, una estrategia contra las drogas y la subversión financiada por Estados Unidos, es un fracaso porque no ha logrado golpear al grupo guerrillero, sino a la población civil.
"Ellos mostraron cantidad de guerrilleros capturados en determinadas regiones. Resulta que no eran guerrilleros sino población que consideraban amiga de la guerrilla", agregó.
Las FARC revelaron recientemente que 11 ex diputados regionales, a quienes mantenían secuestrado desde hace más de cinco años, murieron en cautiverio en un combate con un grupo militar no identificado.
Sin embargo, el gobierno sostiene que los políticos fueron "asesinados" por las FARC. Un informe del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, servicio secreto) sostuvo hace pocos días que las muertes se produjeron en un combate entre dos grupos de las FARC.
El grupo guerrillero aceptó que una comisión internacional de España, Francia y Suiza participe en el análisis forense de los 11 ex legisladores regionales.
La recuperación de los cadáveres se tramita con ayuda del comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
El grupo insurgente mantiene en su poder a un grupo de secuestrados, entre los que se encuentra la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y varios líderes políticos e integrantes de las fuerzas militares, a quienes esperan canjear por todos los rebeldes presos.