TOKIO.- Inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) comenzaron hoy una revisión de cuatro días de la central atómica japonesa de Kashiwazaki-Kariwa, que recientemente fue afectada por un terremoto y debió ser apagada, según informó la agencia de noticias nipona Kyodo.
Los inspectores quieren aclarar sobre todo si la desconexión realizada durante el sismo de 6,8 grados a mediados de julio se realizó de acuerdo a las normas de seguridad. También se investigará la filtración de pequeñas cantidades de radiactividad en el aire y el agua.
En total se registraron tras el sismo 50 defectos técnicos, que inicialmente no fueron informados por los administradores de la central.
El jefe de la delegación del OIEA, Philippe Jamet, señaló a la prensa al llegar a la central que primero los inspectores buscarán obtener una imagen general. El gobierno en Tokio invitó al OIEA a revisar la instalación atómica. Tras el sismo los reactores no fueron encendidos nuevamente.
El director general del OIEA, Mohammed el Baradei, calificó el viaje de importante para obtener experiencia. Agregó que la misma podría tener consecuencia en los futuros estándares de seguridad atómica. Está previsto que los inspectores regresen a Viena el 11 de agosto.