MEXICO DF.- Dos días después de haber tocado tierra por primera vez en México como un furioso huracán categoría 5, Dean se resistió por varias horas el jueves a desaparecer y atravesó el país como depresión tropical rumbo a la costa del Pacífico.
Dean dejó al menos diez muertos en territorio mexicano, cuatro de ellos en el deslave de un cerro el jueves en el estado central de Puebla, que se sumaron a los 17 que ocasionó a su paso por varias islas del Caribe, principalmente en el empobrecido Haití.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos había pronosticado el miércoles que Dean se disiparía en la noche.
No obstante, el jueves permaneció sobre el estado de Jalisco, en el occidente de México, con vientos sostenidos de 45 kilómetros por hora para más tarde salir hacia aguas del océano Pacífico, dijo la Comisión Nacional del Agua (CNA).
Dean continuó provocando lluvias en buena parte del territorio tras haber causado inundaciones y pequeños deslaves en los sureños Veracruz y Tabasco, sobre el Golfo de México, pero también en estados centrales como el Estado de México, Puebla, Hidalgo e incluso en la Ciudad de México.
En Hidalgo, dos mujeres murieron cuando el techo de su casa se desplomó a causa de la intensa lluvia, y en Michoacán, en el occidente, un hombre falleció al ser alcanzado por un rayo mientras se cubría del aguacero bajo un árbol.
Otro hombre que intentó cruzar un río en el municipio de Tlacolula, en Veracruz, murió ahogado el jueves.
"El riesgo no ha pasado", dijo el presidente Felipe Calderón durante un recorrido por las zonas afectadas.
"Corren el riesgo que una vez pasada la tormenta, una vez pasada la creciente viene el reblandecimiento de la tierra, se desgaja el cerro literalmente sobre las casas, sobre los techos y estas son las tragedias que estamos enfrentando", agregó.
El miércoles, en Veracruz, una persona murió electrocutada cuando en medio del huracán subió a reparar el techo de su casa, mientras que en Puebla un anciano falleció aplastado por un muro de su casa que se reblandeció a causa de las lluvias.
Las autoridades dicen que algunas de estas muertes no pueden ser relacionadas directamente con el fenómeno meteorológico.
En su último reporte, la CNA dijo que en la tarde del jueves Dean se desplazaba hacia el oeste ya sobre el océano, dos días después de llegar a territorio mexicano por la Costa Caribe como un violento huracán categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson, que implica vientos superiores a los 250 kilómetros por hora.
Dean tocó territorio mexicano por primera vez la madrugada del martes en la península de Yucatán, después salió al Golfo de México y reingresó a tierra por el estado de Veracruz, perdiendo intensidad en su recorrido.
A su paso, el huracán arrancó techos de viviendas humildes, derribó árboles y postes de luz, dejó pueblos enteros inundados e inutilizó un puerto de cruceros del Caribe y arruinó cosechas enteras.
Sólo en Veracruz, Dean dejó a 61,408 personas damnificadas, según el ministro del Interior, Francisco Ramírez Acuña, mientras que la Secretaría de Agricultura dijo que es muy pronto para cuantificar los daños a los cultivos.
La situación es delicada en Veracruz, que es el principal productor de azúcar y el segundo mayor de café del país.
"Para mí, todavía en estos momentos es aventurado cuajar alguna cifra en Veracruz", dijo el jueves el secretario de Agricultura, Alberto Cárdenas, en una rueda de prensa.
"Esto es a veces como cuando llega un doctor a ver un paciente. Lo primero, antes que sacar la receta, es saber exactamente qué tiene", agregó el funcionario.
El mal clima generado por Dean también provocó inundaciones en algunos puntos de la ciudad de México y en un tramo de la autopista México-Puebla, que tuvo que ser cerrado.