PEKÍN.- Una niña china de ocho años llegó a Pekín luego de haber corrido 3.560 kilómetros para celebrar los Juegos Olímpicos del 2008, informó la prensa local, en un hecho que provocó acusaciones por abuso de menores contra el padre de la pequeña.
Zhang Huimin inició el 3 de julio en Sanya, en la provincia sureña de Hainan, la extraordinaria odisea que la llevó a la capital china, en la que su padre la acompañó durante todo el trayecto en una motocicleta, informó la agencia Beijing News.
Zhang se levantaba todos los días a las 2.30 horas para entrenarse para la carrera, informó la agencia de noticias Xinhua, y debió correr cerca de 65 kilómetros diarios durante 55 días, el equivalente a un maratón y medio por jornada.
La prensa local y algunos expertos acusaron de abuso a su padre, Zhang Jianmin, y sostuvieron que semejante esfuerzo podría dañar el cuerpo de la niña y afectar su crecimiento.
"Mezclé diversión con entrenamiento para mi hija, y además, a ella le encanta correr. No impuse mi voluntad sobre ella", señaló el padre, un corredor aficionado, en declaraciones citadas por la prensa. Agregó que "vale la pena pagar el precio y hacer sacrificios por la gloria del país".