PEKÍN.- Parejas chinas están dispuestas a pagar hasta 26.474 dólares (20.000 euros) a una “madre de alquiler” para lograr tener un hijo en el país asiático aprovechando un vacío legal, recoge hoy el diario estatal “China Daily".
A pesar de la prohibición del Gobierno desde el 2001, una red de intermediarios y agencias, así como los vacíos legales al respecto, mantienen esta práctica.
Una de las agencias de “madres de alquiler” es AA69, que ayuda a 20 parejas al mes a encontrar una mujer para tener a su hijo y las ponen en contacto con hospitales para hacer la inseminación artificial “si es necesario", según Xie, uno de los responsables de la empresa.
A pesar de la prohibición, Xie asegura que los hospitales que colaboran con su agencia están entre los 95 aprobados por el Ministerio de Salud chino para llevar a cabo la reproducción asistida, a pesar del riesgo que corren de perder la licencia por contribuir al negocio de las “madres de alquiler".
Una de estas mujeres, de 32 años, que ya ha dado a luz a dos niños para otros padres, asegura que entró en el negocio porque “no tuve elección, tenía que mantener a mi propio hijo".
En su primer embarazo de alquiler cobró 9.250 dólares y tuvo asistencia médica, pero en el segundo, por el que cobró 13.226, ella misma se hizo la inseminación artificial.
Para las parejas que no pueden tener hijos, encontrar una “madre de alquiler” es el camino para formar una familia, mientras que grupos feministas critican esta práctica porque es un “abuso del cuerpo de la mujer".
Un portavoz del Ministerio de Salud, apellidado Ma, aseguró que es difícil legislar sobre esta materia, ya que “implica cuestiones éticas y normas sociales".